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Anton-Giulio Manganelli (UPF): “Reducir ingresos no será un problema para las ‘farmas’ de la vacuna”

El director del Máster en Pharmaceutical&Biotech Management en Eada Business School e investigador del Centre de Recerca en Economia i Salut (Cres-UPF) sostiene que la salud digital es el subsector más atractivo para los inversores en sanidad.

J. Vera

16 jun 2022 - 04:56

Anton-Giulio Manganell

 

A río revuelto, ganancia de pescadores. Anton-Giulio Manganelli sostine que las farmacéuticas que han comercializado vacunas contra el Covid-19 pueden reducir beneficios, aunque seguirán ganando dinero con ellas ya que se ha entrado en la fase endémica de la enfermedad.

 

El director del Máster en Pharmaceutical&Biotech Management en Eada Business School e investigador del Centre de Recerca en Economía i Salut (Cres-UPF) pone sobre la mesa la importancia de la salud digital, cuyo boom “ya venía cociéndose desde hacía años”.

 

 

Pregunta: ¿La industria farmacéutica está sufriendo un frenazo tras la pandemia?


Respuesta: Durante la pandemia se ha visto que la industria del medicamento era un sector mucho más necesario de lo que se creía. Sin embargo, a partir de ahora, reducir ingresos no será un problema para las farmas de la vacuna. Parece que se está entrando en una fase endémica y es muy probable que se necesiten vacunas anuales, lo que supondrá una fuente de ingresos constantes para las farmacéuticas.

 

 

P.: ¿Y que sucede con las empresas que no están centradas en el coronavirus?


R.: Estos laboratorios están enfocados a otras patologías, en las cuales ahora se podrán realizar los ensayos pendientes que se habían suspendido a causa de la pandemia. Para este grupo de compañías el nuevo paradigma supone una vuelta a la normalidad.

 

 

P.: ¿El mercado se ha llegado a saturar de proyectos contra el coronavirus?


R.: Se podría decir que sí, pero existen matices. Sólo una parte de las vacunas fabricadas han llegado a ser utilizadas a gran escala o han sido aceptadas por el mercado. Hay proyectos que se mueren por el camino y a la sociedad le ha venido bien tener tantas alternativas a su disposición.

 

 

 

 

P.: Ahora ha irrumpido la viruela del mono, ¿esto puede sacudir al mercado farmacéutico?


R.: La viruela del mono ha sido una sorpresa desagradable, pero nada que ver con la pandemia de Covid-19 y con otros problemas mucho más importantes. El mercado debe encarar la guerra de Ucrania, la inflación y la subida de los tipos de interés, cualquiera de estos tres conceptos asusta mucho más que la viruela del mono.

 

 

P.: ¿El inversor siempre verá en la sanidad un buen sector en el que invertir?


R.: El sector salud siempre es interesante para el inversor. Aun así, siempre habrá puntos negativos, como las restricciones presupuestarias en Europa y Estados Unidos y la presión para reducir costes por parte de los distintos gobiernos. Hoy en día, un inversor tiene muchos números de salir ganando si apuesta por la salud digital.

 

 

P.: ¿El Covid-19 realmente marcó un antes y un después para los inversores en salud?


R.: El boom de salud digital ya venía cociéndose desde hacía años; el Covid-19 simplemente ha mostrado cuán importante es la industria farmacéutica y lo vital que es estar preparado para el trabajo en remoto.

 

 

 

 

P.: ¿Por qué la inflación generalizada de España no afecta en tanto al sector sanitario?


R.: La inflación no afecta a la sanidad por la regulación del sector. Los precios de la salud se acuerdan con el ministerio y las comunidades autónomas y, a pesar de que los costes de producción suban, los laboratorios no pueden repercutirlo en el precio final.

 

 

P.: ¿Cómo puede ser España más competitiva en el sector farma?


R.: Hay que tener en cuenta que la mayor parte de empresas importantes del sector están en Estados Unidos y Suiza y, en menor medida, en Alemania y Francia. El resto de los países de Europa puede poner incentivos a las compañías o perfeccionar los sistemas de evaluación de coste-efectividad de los fármacos. En este último caso, Reino Unido es quién ha perfeccionado más el mecanismo.

 

 

P.: ¿La medicina preventiva ya se está imponiendo sobre la curativa?

 

R.: Sí, aunque la velocidad de implantación no es muy elevada. Esto se debe a que hay casos donde apostar por la medicina preventiva puede ahorrar dinero, pero en otras situaciones pueden ser inefectivas. Es un mercado que todavía está evolucionando.