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M. Guerra (Deloitte): “En los hospitales se sigue trabajando como en los 60: hace falta un cambio cultural”

Marcos Guerra, director de consultoría de life sciences&healthcare de Deloitte España, opina que el país "no evalúa suficientemente los resultados en salud” y que “se está produciendo un equilibrio de fuerzas entre el proveedor y el asegurador privado”.

A. Escobar

8 oct 2018 - 04:58

M. Guerra (Deloitte): “En los hospitales se sigue trabajando como en los 60: hace falta un cambio cultural”

 

Marcos Guerra es el director de life sciences&healthcare de la consultora Deloitte. El experto considera que existe un “déficit” de profesionales sanitarios que se va a alargar durante los próximos cinco años.

 

 

Pregunta: Usted ha incidido en distintos artículos en que el ecosistema sanitario será muy diferente en 2025 y en qué aparecerán nuevos roles. ¿A qué se refiere exactamente?

Respuesta: Vivimos en un contexto sanitario en el que tenemos un envejecimiento poblacional que está afectando al patrón del perfil del paciente y ello va a condicionar el aumento del gasto. También tenemos un déficit de profesionales sanitarios que se va a alargar durante los próximos cinco años, puesto que el volumen de jubilaciones en el sector va a ser elevado, y se va a notar especialmente en centros hospitalarios comarcales. Por otra parte, dispondremos de nuevas terapias y procedimientos tecnológicos que van a impactar en la industria, pero en un contexto de reducción presupuestaria. La tecnología, en todo caso, nos va a permitir llevar a cabo modelos más predictivos que curativos. Se va a producir una alianza entre hospitales y stakeholders y las start ups van a jugar, y ya están jugando, un papel protagonista en salud. El sistema va a virar: en lugar de pagar por actividad iremos a un modelo de financiación donde prevalezca la salud del paciente.

 

P.: ¿España está bien posicionada para dar el salto a la irrupción tecnológica en salud?

R.: El problema es que la tecnología no se ha extrapolado a todo el sector salud. La barrera en España es ver quién paga a quién, es decir, bajo qué modelo de negocio la tecnología va a poder ser absorbida por el sistema sanitario. Un hándicap es que España es un país que no evalúa suficientemente los resultados en salud, encima cuando tenemos a los mejores profesionales. Seguimos trabajando de manera similar a cómo trabajaban los hospitales en los años sesenta. Se necesita un cambio de la gestión de la cultura en los propios profesionales.

 

 

 

 

 

P.: ¿El profesional sanitario entonces no ha interiorizado la necesidad de adaptar esa identidad digital?

R.: Existe un consenso entre profesionales del sector salud que creen que el modelo actual está agotado. Este no será sostenible si no activamos palancas de cambio. Los gestores ven con buenos ojos la digitalización, pero en el caso de los administradores públicos, muchas veces están sujetos a un corsé administrativo público que dificulta su autonomía.

 

P.: ¿Cómo va a encontrar el sistema sanitario el equilibrio entre atender la demanda creciente de servicios y gestionar la presión al alza de los costes derivados de esta prestación?

R.: El Ministerio de Sanidad y los departamentos de salud de las comunidades tendrán que buscar un equilibrio entre la presión que los pacientes pueden hacer para conseguir mejores tratamientos y para superar el déficit presupuestario al que estamos encorsetados.

 

P.: ¿La contención presupuestaria existe también en la sanidad privada?

R.: En la sanidad privada no. Es puntera a nivel tecnológico y esa absorción de la que hablaba anteriormente se va a producir de manera más rápida en el sector privado, donde predomina la concentración de grandes grupos hospitalarios.

 

P.: Según un informe de Deloitte y la Alianza de la Sanidad Privada Española (Aspe), parece que existe un amplio consenso sobre la concentración, también, en el mercado asegurador. ¿Hay margen para más operadores?

R.: El mercado asegurador ya lleva tiempo concentrado. Hasta ahora había un poder de negociación de los grandes grupos, pero se está produciendo un equilibrio de fuerzas entre el proveedor y el asegurador privado.

 

P.: ¿España está trabajando adecuadamente en la integración entre industria sanitaria y el ámbito investigador?

R.: Trabajamos bien, pero falta buscar mayores alianzas y sinergias entre los grupos investigadores. Hay que generar una cartera de proyectos mucho más amplia recurriendo a plataformas colaborativas.