2021, el año en que Grifols fue un gigante del plasma en tierra de faraones

Especial 2021, el año de la vacuna

Faraón sanitario. Grifols ha sido una de las empresas protagonistas del sector de la salud en 2021, al margen de las grandes compañías farmacéuticas que han desarrollado y puesto a disposición de los ciudadanos la vacuna contra el Covid-19.

El grupo de la familia Grífols es un claro ejemplo de compañía con sello español conocida y reconocida internacionalmente, que ha continuado creciendo y expandiendo su negocio de productos plasmáticos y que este último año ha puesto el foco en África, concretamente en Egipto.

La primera plataforma

La multinacional catalana y la National Service Projects Organization (Nspo, por sus siglas en inglés) pusieron en marcha durante el año pasado la primera plataforma integrada de suministro de plasma en África, marcando el inicio de una sólida infraestructura alrededor del plasma que llevará al país a alcanzar la autosuficiencia y facilitará el acceso a los medicamentos plasmáticos en toda la región de Oriente Próximo y África, así como en otros estados. La alianza entre Grifols y Egipto es innovadora por sus objetivos y alcance, y une por primera vez a un organismo gubernamental con un fabricante privado de medicamentos plasmáticos para abordar la autosuficiencia del país.

Para ejecutar este plan en África, Grifols puso en marcha, en 2021, junto a la Nspo la joint venture Egypt for Plasma Derivatives, que inicialmente tiene previsto construir y equipar veinte centros de donación de plasma en todo el país. La primera instalación se inauguró en el distrito occidental de Giza, en El Cairo, en un moderno complejo de dos plantas llamado 6 de Octubre.

La plataforma de centros de donación de plasma, repartidos por todo el país y equipados con la tecnología más avanzada, tendrá en el futuro una capacidad de recogida de un millón de litros de plasma al año. El edificio en el que se ubica este primer centro también incluye un laboratorio de análisis para el cribado del plasma y un área para formación perteneciente a The Grifols Academy, el principal programa de formación profesional continuada dirigido a empleados del grupo.

Según los términos de la joint venture, la Nspo posee el 51% del capital y Grifols el porcentaje restante. Hasta que las instalaciones en Egipto estén operativas, la compañía española utilizará sus plantas actuales para producir medicamentos a partir del plasma recogido en el país.

Grifols dispone de una red superior a 350 centros de plasma en todo el mundo. Más de cincuenta están ubicados en Europa. La compañía estimó en la segunda mitad de 2021 que a cierre de año, esta red en Estados Unidos y Europa aumentaría hasta las 370 instalaciones.

Más allá de Egipto

Más allá de Egipto, 2021 también ha sido el año en que la multinacional farma llevó a cabo una inversión estratégica en Biotest. Grifols adquirió la alemana Tiancheng Pharmaceutical Holdings, que controlaba el 90% de las acciones ordinarias de Biotest, por 1.100 millones de euros. El acuerdo de inversión en Biotest complementará la cartera de productos de la española. Entre los ensayos clínicos de fase III, que añadirán siete proyectos nuevos, destacan dos nuevas proteínas: fibrinógeno e inmunoglobulina IgM.

Fundada en 1946, Biotest es una multinacional que cotiza en la Bolsa de Fránkfurt y está especializada en soluciones innovadoras de hematología e inmunología clínica. Con sede en Dreieich (Alemania), desarrolla, produce y comercializa medicamentos biológicos con aplicaciones en hematología, inmunología clínica y cuidados intensivos. La cartera de productos de la compañía incluye doce productos diferentes que se comercializan globalmente en más de noventa países.

El impulso de GIC

La guinda al pastel para Grifols en 2021 tiene que ver con el fondo soberano de Singapur, GIC. Ambos acordaron una inversión por parte de GIC de mil millones de dólares en Biomat USA, filial estadounidense 100% propiedad de Grifols. Biomat es una empresa con una red de 296 centros de obtención de plasma en Estados Unidos. Grifols seguirá controlando todos los aspectos relacionados con la gestión de Biomat y la operativa de los centros.

Estas son las operaciones más destacadas del gigante de hemoderivados, que confía en que la coyuntura de disminución de estímulos fiscales en Estados Unidos siga favoreciendo un mayor incremento de las donaciones de plasma. En Europa, los volúmenes de obtención aumentaron de forma importante respecto a los volúmenes de 2020, que a su vez ya crecieron con respecto a los niveles de 2019.

Grifols acordó con GIC una inversión de mil millones de dólares en Biomat

Grifols cuenta con cuatro divisiones, bioscience, diagnostic, hospital y bio supplies, que desarrollan, producen y comercializan soluciones y servicios innovadores en más de cien países.

El grupo es una de las mayores compañías de plasma, con una creciente red de centros de donación en todo el mundo. Con el plasma obtenido, Grifols produce medicamentos esenciales para tratar enfermedades raras, crónicas y, en ocasiones, potencialmente mortales. Como referente reconocido en medicina transfusional, la compañía cuenta con una cartera de soluciones diseñadas para mejorar la seguridad desde la donación hasta la transfusión. Además, proporciona a los hospitales, farmacias y profesionales de la salud herramientas, información y servicios que contribuyen a ofrecer una atención médica especializada y eficiente.

En 2020, el impacto económico total de Grifols en los principales países donde opera se estimó en 7.500 millones de euros y en 140.000 los puestos de trabajo generados incluidos empleos directos, indirectos e inducidos.