Bristol-Myers Squibb completa la adquisición de Celgene 65.000 millones de euros

La segunda mayor compra en la historia del sector farmacéutico escribe su capítulo final. Este miércoles, Bristol-Myers Squibb (BMS) ha completado la adquisición de Celgene por 74.000 millones de dólares (65.000 millones de euros). La transacción, anunciada en enero del presente ejercicio, es la segunda más grande de la industria, sólo superada por la adquisición de Warner-Lambert por parte de Pfizer en 2000, valorada en 90.000 millones de dólares (91,955 millones de euros a tipo de cambio actualizado).

Según los términos de la fusión, los socios de Celgene recibieron una acción de ordinaria de BMS por cada título que poseían de la propia Celgene. Asimismo, por cada título, los accionistas recibieron 50 dólares (45,4 euros) en efectivo sin intereses y un valor contingente (CVR, por sus siglas en inglés) negociables que dará derecho al titular a recibir un pago de nueve dólares (8,2 euros) en efectivo si se alcanzan ciertas aprobaciones regulatorias.

“Es un día emocionante para Bristol-Myers Squibb, ya que reunimos la ciencia pionera, medicamentos innovadores y el talento increíbles de ambas empresas para crear una gran biofarmacéucia”, ha señalado Giovanni Caforio, presidente y director ejecutivo de BMS.

La compra de Celgene por parte de Bristol-Myers Squibb es la segunda mayor transacción de la historia en el sector farmacéutico

Con motivo de la operación, Roberto Úrbez pasará a ocupar el cargo de director general del grupo en España y Portugal. El ejecutivo, que hasta ahora era vicepresidente y director general de BMS en la Península Ibérica, tomará el cargo a finales de 2019 o a principios de 2020.

Licenciado en Veterinaria por la Universidad de Zaragoza y máster en Dirección Comercial y Márketing por la IE Business School, Úrbez inició su carrera en el departamento de márketing de la estadounidense Merck Sharp&Dohme (MSD). Posteriormente, entre 2003 y 2007, fue el responsable de la unidad de negocio en oncología y hematología en Roche. Finalmente, antes de incorporarse a BMS, ocupó los cargos de director general en España y de vicepresidente de operaciones comerciales en el sur de Europa en Gilead.