Cara y cruz para las ‘farmas’ españolas: mayores ventas con menos rentabilidad hasta septiembre

 

El sector farma en España pierde rentabilidad. A cierre del tercer trimestre, las seis farmacéuticas españolas cotizadas vieron como su beneficio neto agregado experimentaba una caída del 6,9%, hasta 579,3 millones de euros. Su facturación, en cambio, creció un 14,3% entre enero y septiembre, rozando 5.200 millones de euros.

 

La caída en el beneficio neto tiene dos explicaciones. La primera responde a la normativa Niif 16, una medida que obliga a las compañías a incluir sus arrendamientos dentro de un apartado específico de sus cuentas y que ha tenido un impacto negativo en los balances de las mayores empresas del sector. La otra pasa por la estrategia de compras que han adoptado algunas de las empresas.

 

De hecho, si únicamente se tuviera en cuenta el beneficio bruto de explotación (ebitda, por sus siglas en inglés) agregado, la rentabilidad del sector farma español sería mucho mayor. Según los informes que las compañías han remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (Cnmv), el ebitda entre enero y septiembre se ha incrementado un 20,9% interanual, hasta 1.424,2 millones de euros.

 

Faes Farma, Rovi y Almirall son las tres españolas cotizadas que han incrementado su beneficio hasta septiembre

 

Una de las notas positivas en el acumulado del año es Rovi. La farmacéutica madrileña cerró el tercer trimestre con un beneficio neto de 30,7 millones de euros, más del doble respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. La compañía atribuye este crecimiento a “la fortaleza del negocio de especialidades farmacéuticas”, una división cuyas ventas experimentaron un crecimiento del 25%.

 

Faes Farma es otra de las empresas que avanzan a buen ritmo. La firma vasca superó sus propias previsiones y alcanzó un beneficio de 52,9 millones de euros entre enero y septiembre, un 26,5% más respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. La farmacéutica atribuyó este crecimiento a “una campaña de alergia muy agresiva” que ha incrementado las ventas de su antihistamínico y a la consolidación de Laboratorios Diafarma en Portugal, un grupo que adquirió en 2017 por 70 millones de euros.

 

La tercera en discordia en cuanto a la evolución de los beneficios es Almirall. La farmacéutica controlada por la familia Gallardo lleva años apostando por el desarrollo y comercialización de productos dermatológicos, una estrategia que sigue ofreciendo resultados positivos. La compañía se apoyó en los mercados europeos y estadounidenses para incrementar su beneficio un 4,4% a cierre del tercer trimestre, hasta 97,3 millones de euros.

 

El beneficio de Grifols cayó un 9,6% debido a la evolución de los tipos de intereses y a la nueva normativa contable

 

Las cuentas de Grifols, en cambio, siguen otra línea. El gigante de hemoderivados registró un beneficio neto de 432,4 millones de euros hasta septiembre, un 9,6% menos en comparación con el mismo periodo de 2018. Según el grupo, los resultados son consecuencia del impacto en la evolución de los tipos de intereses y el cambio de normativa contable. Esta última medida tuvo un impacto negativo de 20,2 millones en cuenta de pérdidas y ganancias.

 

Reig Jofre fue otra de las víctimas del Niif 16. La farmacéutica catalana ganó 2,3 millones de euros en los nueve primeros meses del año, un 45% menos respecto a los nueve primeros meses de 2018. La caída en los beneficios también viene explicada por un aumento de las amortizaciones asociadas a una operación corporativa. En junio, la compañía adquirió el negocio articular de Bioibérica por un importe mínimo de 46 millones de euros.

 

Pharma Mar, por su parte, multiplicó sus pérdidas hasta septiembre por 24. En concreto, los números rojos de la farmacéutica con sede en Madrid llegaron a 26,9 millones de euros. En paralelo, las ventas del grupo presidido por Fernández de Sousa cayeron un 29,5%, hasta 62,5 millones de euros.