Empresa

Grifols mantiene su estrategia de digitalización en ‘lista de espera’

El grupo español, especializado en el sector farmacéutico y hospitalario, apenas se ha adentrado en el sendero de la transformación digital. La industria se encuentra con escollos regulatorios para encauzar este proceso.

PlantaDoce

25 abr 2018 - 04:55

Grifols mantiene su estrategia de digitalización en ‘lista de espera’

 

La industria farmacéutica tiene un largo camino que recorrer en materia digital. El grupo español Grifols, especializado en el sector farmacéutico y hospitalario, apenas ha encarado un proceso de digitalización que se antoja cada vez más indispensable. Otras compañías están dando pasos en esa dirección: desde Novartis a Teva Pharma, pasando por Boehringer Ingelheim, están llevando a cabo un proceso de transformación digital.

 

Grifols ganó 662,7 millones de euros en 2017 (un 21,5% más) y facturó 4.318 millones de euros (un 6,6% más). Durante el ejercicio, Grifols invirtió 271,1 millones de euros en ampliar y mejorar su capacidad productiva y aumentó un 21% su inversión en investigación y desarrollo (I+D), hasta 266,3 millones de euros.

 

No fue hasta este enero cuando la cotizada del Ibex35 decidió dar un gran paso en materia de digitalización al adquirir el 51% del capital de la tecnológica estadounidense MedKeeper por 98 millones de dólares (80,2 millones de euros). La empresa con sede en Denver provee soluciones informáticas que mejoran la eficiencia y la seguridad dentro del cumplimiento regulatorio de los procesos claves en farmacia.

 

 

 

 

Según Grifols, los productos de la compañía estadounidense complementarán los que ya ha desarrollado la española en el ámbito hospitalario. MedKeeper diseña aplicaciones informáticas para gestionar los flujos de trabajo en la preparación de medicamentos, mejorando la eficiencia del personal y la gestión del mismo.

 

La compañía española también posee el 89,25% de Progenika Biopharma, especializada en el desarrollo de tecnología para la medicina personalizada, y el 50% de Kiro Robotics, dedicada a automatizar maquinaria para el sector hospitalario. El robot Kiro Oncology, por ejemplo, automatiza la preparación de medicación intravenosa en los tratamientos de quimioterapia.

 

 

Las farmacéuticas dan sus primeros pasos en digitalización


Para la suiza Novartis, las nuevas tecnologías y los entornos digitales se han convertido en un factor clave para el ahorro de costes. A finales del año pasado, Vas Narasimhan, consejero delegado de Novartis, señaló que los costes de las pruebas clínicas pueden reducirse entre un 10% y un 25% si la tecnología digital se utiliza para incrementar su eficiencia.

 

La farmacéutica cuenta con doscientos proyectos de desarrollo de fármacos en curso y con 500 ensayos clínicos en proceso. Con el uso del análisis de datos, un algoritmo predictivo calcula en tiempo real las posibilidades de éxito de cada ensayo. Se trata de un paso importante, puesto que el tiempo y el coste que supone el desarrollo de un medicamento es uno de los grandes obstáculos a los que se enfrenta la industria farmacéutica.

 

 

 

 

Por su parte, Teva Pharma se asoció en 2015 con la empresa de software IBM para construir soluciones globales en salud electrónica a través del programa Watson Health Cloud. Ambas compañías trabajan desde entonces con un equipo conjunto para desplegar el uso del big data y tecnologías de aprendizaje automático con la finalidad de crear soluciones terapéuticas avanzadas.

 

Watson es un sistema informático de inteligencia artificial desarrollado por IBM que es capaz de responder a preguntas formuladas en lenguaje natural y que aporta información en tiempo real a los médicos a la hora de atender a un paciente. En su versión Health Cloud, funciona como una plataforma de desarrollo abierta para médicos, investigadores, aseguradoras y empresas enfocadas a la creación de soluciones de salud.

 

Boehringer Ingelheim también se alió con IBM, en su caso en 2010, para desplegar una solución de análisis y optimización de datos. El acuerdo surgió a partir de la necesidad de la farmacéutica alemana de actualizar su plataforma de ventas, la cual fue creada para proporcionar información de negocio que resultase útil para los vendedores a la hora de ofrecer los productos de la empresa.

 

 

El hándicap de la protección de datos


La protección de datos es uno de los grandes escollos para la industria farmacéutica a la hora de afrontar su transformación digital. En Cataluña se trabaja ahora, por ejemplo, en la implementación del Programa Público de Analítica de Datos para la Investigación y la Innovación en Salud (Padris), que permitirá centralizar datos provenientes de radiografías, informes o recetas para ponerlos a disposición de centros de investigación y universidades públicas.

 

 

 

 

Con esta iniciativa se pretende agilizar el proceso de acceso a los datos, ya que actualmente los investigadores se ven en la obligación de llamar al responsable de cada fichero para acceder a determinados datos, lo que conlleva meses de espera y dificulta el cruce de información. En este caso, será la Agencia de Calidad y Evaluación Sanitarias de Cataluña (Aquas), adscrita al Departamento de Salud, la que tendrá la llave maestra de los datos.

 

En dicho programa, que prevé estar operativo el próximo año, todos los datos de la ciudadanía son susceptibles de ser utilizados con fines de investigación. Existe la opción para oponerse al uso de los datos sanitarios si así se hace constar a la Aquas vía email. Dicho procedimiento exige, además, que el paciente en cuestión justifique los motivos de su negativa.

 

Asimismo, falta justo un mes para que se aplique el Reglamento General de Protección de Datos (Rgpd), lo que limitará aún más el uso de los datos personales de los usuarios por parte de las compañías del sector farmacéutico. El próximo 25 de mayo, instituciones, compañías y organizaciones deberán acatar el nuevo reglamento, cuyo objetivo es proteger a los usuarios del mal uso de los datos por parte de terceros.