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IVI reduce capital en un millón de euros en una de sus clínicas

La compañía española, especializada en medicina reproductiva, lleva a cabo esta operación para “devolver participaciones a los socios de la clínica”, según señala el grupo.

A. Escobar

8 jul 2020 - 04:58

IVI reduce capital en un millón de euros en una de sus clínicas

 

 

El gigante mundial de la reproducción asistida reduce capital. El Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) ha llevado a cabo una reducción de capital de un millón de euros en su sociedad IVI Zaragoza, según han confirmado fuentes de la compañía a PlantaDoce.

 

El grupo español especializado en el negocio de la fertilidad ha acometido una reducción de capital de un millón de euros, con un resultante suscrito de 1,3 millones de euros. Las fuentes consultadas señalan que esta operación se ha producido “para devolver participaciones a los socios de la clínica, al ser el capital social muy alto; es una operación estándar”.

 

La sociedad gestiona la clínica que la compañía tiene en el número 31 de la calle Poetisa María Zambrano de Zaragoza, centro que está dirigido por José Serna, doctor en Medicina y Cirugía por el Departamento de Biología Molecular de la Universidad Complutense de Madrid y especialista universitario en reproducción asistida.

 

 

 

 

El centro médico de Zaragoza está especializado en la investigación y aplicación de nuevas técnicas de fertilidad, entre las que se cuentan la inseminación artificial, la fecundación in vitro (FIV), la ovodonación u otras técnicas como el PGT (preimplantation genetic testing). La instalación cuenta con cinco unidades diferenciadas.

 

A la compañía le pasó factura el confinamiento durante la crisis del Covid-19, igual que a muchas otras empresas del sector salud. El grupo se vio obligado a aplazar 4.000 tratamientos y, como consecuencia, dejó de ingresar un mínimo de tres millones de euros en tratamientos.


Los precios en IVI oscilan entre los 900 euros y 8.000 euros, dependiendo del tratamiento que se vaya a realizar. Más allá de la inseminación artificial, una preserva (que incluye analíticas de hormonas durante el ciclo, controles ecográficos durante el ciclo, punción y vitrificación ovocitaria, entre otras acciones) supone un coste aproximado de 2.600 euros. Una fecundación in vitro (FIV), 4.900 euros; mientras que una ovodonación, 7.300 euros.

 

 

 

 

Otro de los hándicaps de esta crisis sanitaria es la relacionada con el paciente internacional, algo habitual en un sector como el de la reproducción asistida acostumbrado a recibir clientes de otros países. Para el IVI; el paciente internacional supone aproximadamente el 20% de su actividad.

 

Algunas de sus clínicas en España tienen mayor relación con pacientes extranjeras que otras, como es el caso de Barcelona, Bilbao, Madrid, Sevilla o Málaga. No obstante, desde la empresa señalan que continúan recibiendo un gran número de llamadas y consultas de pacientes internacionales dispuestos a retomar sus tratamientos.

 

El IVI nació en 1990 como la primera institución médica en España especializada íntegramente en reproducción humana. Desde entonces, ha ayudado a nacer a más de 160.000 niños. A principios de 2017, la compañía española se fusionó con Rmanj, convirtiéndose en el principal grupo de reproducción asistida del mundo. Actualmente cuenta con más de 65 clínicas en once países.