Empresa

Medtronic y Essure, en ‘jaque’: acusados de promover el uso no autorizado de sus implantes

Una investigación del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación destapa que en España se registran 13 problemas diarios con el uso de implantes médicos.

PlantaDoce

25 nov 2018 - 19:00

Medtronic y Essure, en ‘jaque’: acusados de promover el uso no autorizado de sus productos

 

La industria de la salud, en alerta.  La falta de controles de los productos utilizados en los implantes sanitarios ha permitido que miles de materiales sin garantías acaben colocados dentro del cuerpo de los pacientes. Entre las empresas y nombres que se ven afectados se encuentran Medtronic y Essure.

 

En Europa no existe una agencia única que supervise esos productos, pero, además, tampoco hay una base de datos que recoja los incidentes que producen para alertar de efectos negativos. No se les exige estudios con pacientes para probar su correcto funcionamiento, según una investigación del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, adelantada por La Sexta y El Confidencial.

 

Se trata de implantes como prótesis de cadera, marcapasos, lentillas intraocurlares o dispositivos anticonceptivos. En España se registran 13 problemas diarios con alguno de estos implantes, según la investigación.


La información revela correos electrónicos internos de los organismos de certificación en el que admiten que el 96% de cualquier tipo de implantes se aprueba en todo el mundo con la única prueba de un informe técnico: no se exigen pruebas en sujetos humanos que certifiquen su eficacia y ausencia de problemas.

 

 

 

 

 

Una de las empresas afectadas es Medtronic, firma especializada en el desarrollo de productos sanitarios tecnológicos. Según desvela el informe, Estados Unidos ha acusado en distintas ocasiones a Medtronic de promover el uso no autorizado de sus productos, estafar a autoridades públicas de sanidad, fijar precios de mercado, remunerar a médicos para que elaboraran estudios a su favor y por violar las normas de libre competencia.

 

Essure aterrizó en España entre  2002 y 2003. Este anticonceptivo provocaba reacciones alérgicas en muchas de las implantadas e incluso llegaron a registrarse perforaciones de la trompa de falopio y otros órganos adyacentes por una mala posición del implante durante su colocación.