Rovi tambalea con su negocio de fabricación a terceros mientras estudia su venta

La fabricación a terceros continúa siendo el lastre de Rovi. La farmacéutica madrileña, que elevó considerablemente su negocio en los últimos años gracias a la vacuna de Moderna, sigue sin remontar su división de producción de fármacos para terceros. En el primer semestre, esta categoría se hundió un 31%, hasta 118 millones de euros, según El Economista.

 

Desde hace un tiempo, Rovi anunció que evalúa poner a la venta esta división, que además pasó de representar el 49% de los ingresos totales de la empresa en 2023 al 36% en la actualidad.

 

Para mitigar el impacto de la menor demanda de vacunas contra el Covid-19, Rovi ha ido consolidando estrategias con otros socios, ya que Moderna anticipó que en el futuro la demanda de la vacuna seguirá en descenso.

 

En este sentido, Rovi está trabajando en el desarrollo de jeringuillas precargadas para la cual se ha aliado con una empresa confidencial que aportará la tecnología para su desarrollo. El pasado abril, el grupo madrileño anunció el acuerdo con el que prevé elevar sus ingresos hasta 600 millones de euros.

 

 

Según los términos del acuerdo, Rovi pondrá a disposición una línea de producción de alta velocidad en sus instalaciones de San Sebastián de los Reyes (Madrid). Allí, la empresa prevé contar con una capacidad de producción de cien millones de unidades al año. El acuerdo tiene una duración de cinco años desde la fecha de fabricación del primer lote comercial, que no será hasta 2026. El primer año completo de fabricación recurrente será el siguiente curso, 2027.

 

En paralelo, Rovi tiene previsto seguir avanzando en materia de investigación y fabricación de terapias avanzadas. Para ello, la compañía unió fuerzas con el Gobierno y el laboratorio Insud Pharma con una inversión inicial de 74,9 millones de dólares y que podría elevarse hasta 220 millones.

 

Rovi cerró los primeros seis meses del ejercicio con un beneficio de 44,3 millones de euros, un 33% menos que en el mismo periodo del año anterior. El resultado bruto de explotación (ebitda) se contrajo un 28%, mientras que sus ingresos fueron de 329,3 millones de euros, un 14% menos.

 

La compañía destacó en la presentación de sus resultados que de cara al cierre de 2024 espera que sus ingresos operativos disminuyan en la banda media de la primera decena (entre 0 y 10%) con respecto a los de 2023.