El exceso de mortalidad de la UE decae hasta la tasa más baja desde julio de 2020

La mortalidad por Covid-19 remite en la Unión Europea (UE). El exceso de mortalidad en esta región se ha situado en el 4,4% y marca la tasa más baja desde julio de 2020, cuando se situó en el 2,8%, según los últimos datos sobre el exceso de mortalidad publicados por Eurostat y que se basan ​​en la recopilación de datos de muertes semanales.

El exceso de mortalidad se refiere al número de muertes derivadas de todas las causas evaluables durante el transcurso de una crisis y que se consideran por encima de lo que podría observarse en condiciones normales. El porcentaje final se desprende de la comparación con los promedios durante los mismos meses entre 2016 y 2019. Este indicador forma parte del European Statistical Recovery Dashboard y se usa para cuantificar la magnitud de la crisis sanitaria.

Aun así, el exceso de mortalidad de la UE sigue variando en función del estado miembro. En el caso de Chipre, esta estadística vuelve a subir con un incremento del 26%, mientras que en Bélgica se registra un descenso del 3%.

En España, este dato se ha situado en un incremento del 9,7% y sigue en sintonía con el incremento medio del 7,2% que se ha experimentado desde enero

A escala general de la UE, el porcentaje ha ido disminuyendo de forma progresiva desde mayo de 2021. Anteriormente, se llegó a un pico de incremento del 40% en noviembre de 2020. El pasado año, la región experimentó dos ciclos de gran exceso de mortalidad: el primero entre marzo y mayo de 2020, con un pico del incremento del 25% en abril como consecuencia del estallido de la pandemia de Covid-19, y otro más largo entre agosto de y fin de año.

Durante el primer trimestre de 2021, el exceso de mortalidad en la UE aumentó, de media, un 10%. Aunque el porcentaje continúa alto, es notablemente inferior al incremento de hasta el 40% experimentado en noviembre de 2020.

En España, este dato se ha situado en un diferencial del 9,7% y sigue en sintonía con el incremento medio del 7,2% que se ha experimentado desde enero. Estas cifras distan mucho del pico alcanzado durante abril de 2020, cuando el exceso de mortalidad superó el 80%.