España vuelve a elevar su dependencia de China en antibióticos y registra máximos desde 2020

Tras años de descenso, la dependencia española de medicamentos antibióticos procedentes de China vuelve a remontar. Casi cuatro de cada diez fármacos de este tipo que compra España ya proceden del gigante asiático, según datos de 2022, el máximo desde 2020.

En 2022, las importaciones españolas de productos antibióticos de China alcanzaron un valor de 115,5 millones de euros, un alza del 2% en comparación con 2021. En total, España importó antibióticos por valor de 309 millones de euros el año pasado, lo que supone que el 37,4% de estas compras se realizaron al país asiático, según datos publicados por Icex España Exportaciones e Inversiones.

La dependencia china ha aumentado en los últimos años, ya que en 2021 las importaciones alcanzaron 113,3 millones de euros, lo que supuso el 37,3% sobre el total. En 2020, año del estallido de la pandemia a escala global, el valor de las importaciones sí que marcaron récord, con 126,8 millones de euros, pero, sin embargo, el porcentaje sobre el total se situó en el 30,3%.

En época prepandémica, concretamente en 2019, las importaciones españolas de antibióticos de China alcanzaron un valor de 105,9 millones de euros, copando el 37,3% sobre el total. Hay que remontarse a un año antes, a 2018, cuando el peso de estos productos fue mayor, ya que entonces las importaciones se situaron en 113,2 millones de euros y el porcentaje sobre el total fue del 37,8%.

Otro máximo histórico es el que se produjo en 2015, cuando España importó medicamentos antibióticos de China por valor de 125,4 millones de euros, lo que se tradujo en el 42,7% sobre el total.

China abandera el ránking, con gran diferencia respecto de sus competidores. El top tres lo completan Estados Unidos y Suiza. España importó antibióticos del país norteamericano por valor de 67 millones de euros en 2022, mientras que hizo lo propio con la confederación helvética por valor de 29,1 millones de euros.

España examina su relevancia internacional en Pekín

Las relaciones internacionales entre China y España tomarán entre este jueves y el viernes un nuevo rumbo con la visita del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a su homólogo chino, Xi Jinping. El mandatario español será el primer líder occidental en reunirse con el presidente chino después de que este presentara una propuesta para terminar la guerra de Ucrania ante Vladimir Putin.

A la llegada de Sánchez se sumarán en los próximos días las caras más visibles de la política europea, entre las que se encuentran Emmanuel Macron, Ursula Von der Leyen o Giorgia Meloni. Pekín, en plena confrontación con Estados Unidos y después de más de tres años de estricta clausura, quiere acercarse a Europa.

Para España, que asumirá la presidencia rotatoria de la Unión Europea (UE) en el segundo semestre de 2023, el encuentro es una prueba de relevancia internacional y una oportunidad para convertirse en un mediador en el proceso de paz entre Ucrania y Rusia.

Durante el encuentro también se abordará la relación comercial entre ambos países, entre las que existe un elevado déficit comercial: mientras que China es el principal proveedor internacional de España, las exportaciones españolas son el undécimo mercado para el gigante asiático.

España y China establecieron relaciones diplomáticas el 9 de marzo de 1973, hace justo cincuenta años. Ahora, desde Moncloa buscan presentar a España como destino de inversiones internacionales, recuperar el flujo de turistas chinos de antes de la pandemia y apuntalar la presencia de las más de 600 empresas españolas implantadas en el país.