Entorno

Josep Lluís Sanfeliu (Barcelona Global): “En un mundo tan volátil, el liderazgo no encaja”

Josep Lluís Sanfeliu (Barcelona Global): “En un mundo tan volátil, el liderazgo no encaja”
Josep Lluís Sanfeliu (Barcelona Global): “En un mundo tan volátil, el liderazgo no encaja”
"El desafío es, sin liderar, ayudar a crear las condiciones para que Barcelona pueda liderar una parte de Europa"

M. Tamayo

5 ene 2024 - 05:00

Unir sin liderar. Este es el reto que se ha puesto la asociación Barcelona Global con la creación del Chapter de Life Sciences que dio sus primeros pasos con un encuentro a finales de año y empezará a desarrollarse este 2024 con distintos grupos de trabajo que aborden la financiación o la atracción de talento. Josep Lluís Sanfeliu, vicepresidente de Barcelona Global y fundador de Asabys, es el encargado de dirigir esta iniciativa y señala que Barcelona se encuentra en una buena situación de partida para hacerse un hueco en el mapa global de la salud.

 

Pregunta: ¿Barcelona tiene potencial para convertirse en la capital de las ciencias de la salud del sur de Europa?

Respuesta: Sí. En los últimos veinte años no habíamos visto una inversión tan fuerte en start ups de salud en la ciudad y en 2024 la tendencia continuará siendo ascendente. Un momento clave para el sector fue la elección de Barcelona por parte de Atrazeneca en 2023 para colocar un hub investigación biomédica de referencia mundial, para el que se crearán mil puestos de trabajo. Además, contamos con centros de investigación consolidados y con una productividad científica creciente.

 

P.: ¿Desde la Administración se coloca la salud en la agenda de Barcelona?

R.: La salud forma parte integral de la estrategia del Ayuntamiento de la ciudad y sigue en ella. Contamos con nuevos proyectos de infraestructuras que se harán realidad los próximos años como el Mercat del Peix, el Instituto de Investigación de la Caixa o bioclúster de innovación y salud Biopol de L’Hospitalet de Llobregat. La conjunción de este impulso institucional junto con la iniciativa privada genera unos ingredientes que hace mucho que no se producían: no nos podemos desviar y hay que aprovechar el momento, por esto desde Barcelona Global se ha formado este grupo de trabajo.

 

 

P.: Se trata de un ecosistema complejo entre hospitales, universidades, empresas y administración ¿quién debe liderar la iniciativa?

R.: La palabra liderazgo está sobrevalorada y mal entendida. En un mundo tan volátil, incierto y complejo, una figura o una institución que lidere no encaja. Debe estar en segundo plano. Eso es lo que estamos intentándo. Pero es cierto que quizás no sea fácil debido a una industria farmacéutica historica junto con hospitales públicos y privados, universidades, centros de investigación, etc. La ciudad cuenta con un talento impresionante, pero muy sólido y asentado y científicos y médicos siguen su propio camino. No podemos pretender ponernos al frente y guiar. El desafío es, sin liderar, ayudar a crear las condiciones para que Barcelona pueda liderar una parte de Europa.

 

P.: ¿A la salud le faltan puntos de encuentro?

R.: Sí, y uno de los pilares básicos es la integración del ecosistema con una mayor convergencia entre personal industrial e institucional. Debemos alcanzar una mayor interlocución, fomentando el diálogo que hable entre todos los actores del ecosistema. Ya se hace en París, con el centro Sanofi, o aquí con las start ups del sector tecnológico. Los emprendedores y protagonistas del sector salud tienen una amplia trayectoria y una edad de más de 35 años. No irán cada tarde a un meet up de startups. Hay que logar puntos de encuentro sin ser muy disruptivo. Además, tampoco pasa nada por ser un poco más lúdicos, que en Barcelona parece que nos cuesta.

 

P.: Otro de los aspectos que se trabajaran en el Chapter es la marca ¿la salud sabe crear marca?

R.: Desde mi punto de vista, Barcelona no se encuentra en el top of mind de las ciencias de la vida. Aunque contamos con grandes empresas como Grifols o Almirall, aún es pronto para realizar este movimiento. La gente asocia la ciudad a turismo o gastronomía o hasta marcas de moda como Desigual o Mango, pero no a empresas de salud. Cuando hayamos hecho los deberes ya podremos asociar la ciudad a marcas de salud. El objetivo es situarnos en el mapa como ya lo estamos en el sector de la investigación y mirar de frente a frente a Boston, Múnich o París.

 

 

P.: ¿Es un buen sector para captar talento?

R.: El dinero sigue al talento y el talento es el nuevo magnetismo. En Barcelona, no escasea. Lo tenemos de manera natural, con universidades y centros de investigación. La gente quiere venir, hay talento y proyecto, el siguiente paso son los fondos. Lo estamos haciendo, pero hay una brecha en la investigación básica, se necesitan más recursos científicos. Los centros públicos tienen mucha productividad, pero deben aumentar los salarios. La parte más crítica del proceso es el financiamiento del proyecto en las fases más tempranas. En París y en Boston se ha conseguido con fórmulas que permiten distribuir el riesgo, con diferentes agentes que colaboran. El talento asistencial es otro problema. Un médico nunca será emprendedor si tiene que combinar dos trabajos con guardias. La retribución del talento y su sostenibilidad son otra brecha. Si el régimen asistencial carece de recursos perjudica a todo el sector.

 

P.: La financiación se ha complicado por el entorno macroeconómico y las biotecnológicas son bastante dependientes ¿cómo se puede esquivar este frenazo?

R.: La situación macroeconómica para 2024 esperamos que sea mejor de lo que parece. Se estabilizará y, tras un año de muchas restricciones en 2023, somos optimistas para 2024. El año pasado estuvo congelado y la inversión del capital de riesgo y privado ha caído en tasas de casi el 50% en España. El capital se ha refugiado en valores seguros. En 2024 no será igual, habrá otra perspectiva. Para el sector, este año no ha habido muchas noticias, pero en el próximo veremos más capital privado e historias de éxito. Además, al menos no habrá elecciones en la ciudad, lo que proporcionará estabilidad institucional.

 

P.: ¿Qué le pediría a la administración pública?

R.: Han de colaborar y dejar que las empresas y los inversores puedan realizar su actividad. Ya lo están haciendo y esta es la dirección.

 

P.: ¿Y qué deberes tiene el privado?

R.: Continuar impulsando proyectos. Los inversores deben seguir impulsando proyectos y la industria tradicional a abrirse más a las nuevas generaciones. Ser más abiertos y permeables.