Entorno

La obesidad, nueva mina de oro del ‘farma’ que apunta a 54.000 millones en 2030

Desde que los medicamentos destinados a controlar los niveles de azúcar en la sangre de los diabéticos comenzaron a reducir el apetito de los consumidores, farmacéuticas como Novo Nordisk o Eli Lilly han visto en el sobrepeso su nueva fuente de oro.

Albert Martínez

2 dic 2022 - 04:56

La obesidad, nueva mina de oro del ‘farma’ que apunta a 54.000 millones en 2030.

 

El farma busca en la obesidad su nuevo jackpot. El aumento de peso en los ciudadanos del mundo lleva décadas despertando el gusanillo de la industria farmacéutica, que comienza a dar sus primeros pasos en el lanzamiento de fármacos contra la obesidad, punta de lanza de una industria que en 2030 generará 54.000 millones de dólares anuales en todo el mundo, según el informe Why Obesity Drugs May Be a New Blockbuster Pharma Category realizado por Morgan Stanley.

 

Entre 1999 y 2020, la tasa de obesidad de los estadounidenses aumentó del 30,5% al 41,9%. Este incremento provocó que, en junio de 2013, el Ejecutivo que entonces presidía Barack Obama reconociera por primera vez y de forma oficial que la obesidad era una enfermedad.

 

Desde entonces, la industria del farma ha intentado buscar en la promesa del adelgazamiento su nueva fuente de oro. Con más de cien millones de potenciales consumidores sólo en Estados Unidos, el sobrepeso se ha convertido en campo de batalla de las farmacéuticas desde que los medicamentos destinados a controlar los niveles de azúcar en diabéticos comenzaron a reducir el apetito de los pacientes.

 

 

 

Desde entonces, la dieta, el deporte e incluso las intervenciones quirúrgicas ya no son las únicas opciones para bajar de peso. En este momento, la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) permite tanto la comercialización de Wegovy, fabricado por Novo Nordisk, como la de Mounjaro, fabricado por Eli Lilly, dos medicamentos que han mostrado rebajas de peso de entre el 15% y el 20% en los usuarios.

 

Wegovy fue aprobado por la FDA en julio de 2021 y desde entonces su popularidad no ha parado de crecer. El fármaco, que se inyecta una vez a la semana, despertó el interés de medio mundo después de que la cantante Queen Latifah o el dueño de Tesla, Elon Musk, atribuyeran al medicamento su estado físico.

 

El fármaco que produce Novo Nordisk ha aumentado tan exponencialmente su número de consumidores que ha terminado escaseando. La dificultad para fabricar semaglutida, el ingrediente del medicamento que regula la insulina y controla el apetito, ha dejado sin suministro a muchos pacientes en Estados Unidos, de tal forma que la compañía se ha visto obligada a interrumpir su comercialización durante un tiempo.

 

 

Mounjaro, el fármaco comercializado por Eli Lilly, logró que los pacientes con diabetes tipo 2 recortaran su sobrepeso hasta un 20%. En mayo, fue aprobado por el regulador americano para el tratamiento de la diabetes y tiempo después como medicamento contra el sobrepeso. En el tercer trimestre, las ventas del medicamento fueron de 187,3 millones de dólares y más de la mitad provinieron del mercado estadounidense. 

 

Las grandes farmacéuticas observan atentamente la evolución de este mercado. Actualmente, tanto Merck como Pfizer o Astrazeneca se encuentran en fase dos de investigación de medicamentos para controlar el sobrepeso. Mientras Merck avanza en el estudio de la Efinopegdutida, Pfizer hace lo propio con el Danuglipron y Astrazeneca se ha aliado con Regeneron para el desarrollo de un fármaco que reduzca la obesidad a través del gen GPR75.

 

Pese al aumento en los competidores de este nuevo mercado, el citado informe de Morgan Stanley asegura que Novo Nordisk y Lilly captarán alrededor del 40% de la facturación en 2030. Entonces, Novo Nordisk ingresará 9.000 millones de dólares en este mercado, mientras que Mounjaro puede llegar a facturar 21.000 millones de dólares.