Entorno

Los hospitales privados facturaron 12.400 millones de euros en 2022

La gestión de estas entidades privadas en 2022 incrementó un 5,5% interanual. Las cifras recabadas provienen de las clínicas benéficas y no benéficas, y están excluidas las de organizaciones no gubernamentales.

PlantaDoce

30 may 2023 - 12:28

 Los hospitales privados facturaron 12.400 millones de euros en 2022

 

Facturación al alza. Un informe del Observatorio Sectorial DBK de Informa que los hospitales privados facturaron 12.400 millones de euros en 2022, un 5,5% más que 2021. El incremento se ha debido a la ampliación y mejora de la oferta y a la mayor demanda de los servicios privados de la salud. Ante la dificultad que tienen las entidades públicas en atender las demandas necesarias de la población.

 

Los convenios con aseguradoras, mutuas y entidades colaboradoras con la Seguridad Social aportaron una facturación de 6.865 millones de euros, lo que supuso un crecimiento del 6% respecto al año anterior. Este sector ya representa un 55,4% del total de aseguradoras.

 

Los ingresos derivados de conciertos con administraciones públicas se situaron en 4.325 millones de euros, mostrando un aumento del 4,8%. La oferta privada de hospitales en España en 2022 seguía estando compuesta por 411 centros, misma cifra que en el año anterior. Estos hospitales contaban con una dotación de 46.681 camas, 53 menos que en 2021. Por otro lado, el segmento de clientela privada pura contabilizó una variación del 5,2%, alcanzando una facturación de 1.210 millones de euros, el 9,8% del total.


 

En 2021 se encontraban en funcionamiento 411 hospitales privados, diez menos que en el año anterior. Estos centros contaban con 46.734 camas. Los principales grupos siguen llevando a cabo operaciones de compra de clínicas y de operadores de menor tamaño, prolongándose la tendencia de crecimiento del grado de concentración de la oferta, de acuerdo con la información del estudio.

 

Los hospitales privados fueron recuperando gradualmente durante 2021 su nivel de actividad habitual y, con ello, la tendencia creciente en el volumen de negocio que venía dándose hasta 2019. Sin embargo, su capacidad operativa siguió viéndose condicionada por la evolución de la pandemia, en particular por los rebrotes que se produjeron sobre todo en la última parte del año.