Entorno

Especial 2020: el negocio de la salud en el año del Covid-19

Nuevos pasos en el sector de las residencias

El sector de la atención a la dependencia crece a un ritmo superior al 3%, aunque ha sido de los más expuestos durante la crisis del Covid-19.

A. Escobar

29 dic 2020 - 05:00

Nuevos pasos en el sector de las residencias

 

Como cada año, PlantaDoce.com realiza en las últimas semanas de diciembre un repaso a los últimos doce meses en el negocio de la salud, marcados por el impacto de la pandemia del Covid-19. Análisis macroeconómico de España y el mundo, recorrido por los fenómenos sociales que ha provocado el coronavirus y un recorrido por el impacto en las principales empresas del sector forman el Especial 2020: el negocio de la salud en el año del Covid-19.

 


 


El negocio de la tercera edad continúa sacando pecho y mostrándose como un gran reclamo para el inversor. El envejecimiento de la población, ancianos cada vez con mayores comorbilidades y el aumento del índice de dependencia hacen que el sector de la gestión de las residencias gane adeptos entre los empresarios.

 

La evolución de la pirámide demográfica ha permitido que las gestoras de residencias geriátricas crezcan a un ritmo constante siempre superior al 3% anual, con una previsión de completar 2020 con alrededor de los 5.000 millones de euros de facturación.

 

“La actividad de las empresas gestoras de residencias para la tercera edad mantuvo en 2019 una evolución positiva, en un contexto de incremento de la oferta, mayor grado de ocupación de las plazas y tendencia al alza de las tarifas”, señala DBK Informa. En su último informe sobre el sector, publicado en septiembre de 2020, situaba la cifra de negocio de 2019 en 4.600 millones de euros.

 

 

 

 

 

En 2020, la actividad sectorial se vio notablemente alterada por las consecuencias del Covid-19, que produjo un alto número de bajas en los centros y un descenso de nuevos ingresos, sobre todo durante la primera ola de la pandemia, ante los protocolos de seguridad implantados y la reticencia de los potenciales usuarios. Esta situación se agravó por el deterioro de la coyuntura económica. El sector avanza con mayor presencia de unidades de convivencia, con unos protocolos y programas de formación adaptados a las exigencias del coronavirus y con una demanda sostenida.

 

De hecho, para cubrir la demanda de los próximos años se deberán crear 400.000 plazas adicionales hasta 2050, más de las que se ofrecen en la actualidad, según un informe de la consultora PwC junto a la Federación Española de la Dependencia (FED). El porcentaje de personas mayores de 64 años sobre el total de la población es actualmente del 19,4%, mientras que en treinta años el porcentaje se elevará hasta el 33%, según la agencia estadística europea Eurostat. Sólo en Europa se estima que habrá 149 millones de personas mayores de 65 años en 2050.

 

 

El porcentaje de personas mayores de 64 años sobre el total de la población en España le sitúa en la posición 17 de la clasificación y por debajo de la media de la Unión Europea, que registra un 20,3%. El estudio señala, además, que existe un déficit de 66.000 plazas en residencias para la tercera edad. En treinta años, harán falta alrededor de 785.000 plazas para cubrir las estimaciones demográficas del Instituto Nacional de Estadística (INE) y las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

 

Se deberán construir más de cien residencias nuevas cada año, ya que cada equipamiento tiene un tamaño medio de 125 plazas por residencia. En la actualidad, hay una cartera de proyectos de más de 270 centros residenciales. Y en el sector privado, el mapa español de residencias de la tercera edad está absorbido por el capital francés, con nombres propios como DomusVi, Orpea Ibérica, Emera o Korian, entre otros.

 

Gigantes ‘made in’ Francia

El líder del mercado continúa siendo DomusVi. La compañía francesa, controlada por PAI Partners, fusionó en 2016 los negocios de la gallega Geriatros y la catalana Sarquavitae, consolidando un gigante que en España ya ha invertido más de 550 millones de euros desde su nacimiento. No cede el trono, pues en 2019 el grupo facturó más de 600 millones de euros, según los últimos resultados disponibles. Ese avance se ha producido tanto con adquisiciones como con el crecimiento orgánico y la adjudicación de la gestión del servicio público en algunas regiones del país.

 

DomusVi cuenta con más de 26.000 plazas asistenciales en más de 200 residencias de ancianos, de atención a la discapacidad y salud mental y centros de atención diurna. De forma segmentada, la empresa gala engloba más de 130 residencias, más de veinte centros y hospitales de día y más de quince centros de atención a la discapacidad. La compañía cuenta con instalaciones en Galicia, Comunidad de Madrid, Valencia, Andalucía o Cataluña.

 

Uno de los proyectos más destacados de este operador en 2020 fue el concurso que se adjudicó en Tarragona para la construcción y explotación de una nueva residencia para mayores en la calle Mercè Rodoreda de esta localidad catalana. El complejo residencial ofrece 140 plazas residenciales para personas mayores y veinte plazas de centro de día. El plazo de concesión se extiende por cincuenta años. La residencia está diseñada en unidades de convivencia compuestas de pequeños espacios.

 

 

 

 

 

Otro de los grandes operadores del sector geriátrico es Orpea. Se trata de es un grupo francés creado en 1989 por Jean-Claude Marian. Su filial en España, Orpea Ibérica, cuenta con más de 10.300 plazas residenciales, en sus más de cincuenta centros del país. La compañía está presente en Andalucía, Aragón, Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Galicia, Madrid, La Rioja y Valencia. La empresa facturó 198 millones de euros en la Península Ibérica en 2019, región en la que Manuel Aznar es el consejero delegado desde 2009. Orpea también opera en Francia, Bélgica, Italia, Suiza y Alemania, entre otros países.

 

El pasado octubre, la residencia Orpea Madrid Aravaca abrió una nueva unidad de psicogeriatría especializada en la atención de residentes con antecedentes de patologías psiquiátricas o mayores con síntomas psiquiátricos secundarios. La unidad se creó en colaboración con la Clínica López Ibor. Más allá de DomusVi u Orpea, Emera es otro de los grandes actores de este sector. Emera dispone de más de 4.000 plazas residenciales en más de cuarenta centros en Europa. Uno de sus últimos proyectos es una residencia en Madrid.