Un megacontrato para blindar la capacidad de suministro

Como cada año, PlantaDoce.com realiza en las últimas semanas de diciembre un repaso a los últimos doce meses en el negocio de la salud, marcados por el impacto de la pandemia del Covid-19. Análisis macroeconómico de España y el mundo, recorrido por los fenómenos sociales que ha provocado el coronavirus y un recorrido por el impacto en las principales empresas del sector forman el Especial 2020: el negocio de la salud en el año del Covid-19.

Especial 2020: El negocio de la 
salud en el año del Covid-19 

La pandemia ha obligado a tomar decisiones a la Administración central, en general, y, especialmente, al Ministerio de Sanidad. Para hacer frente a la crisis sanitaria, el Ejecutivo anunció durante el verano un acuerdo marco para la adquisición de material anti Covid-19. Con la adjudicación de este acuerdo marco no se pretendía comprar material sanitario directamente, sino comprometer capacidades de suministro para cuando fuera necesario.

El Ministerio de Sanidad, a través del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), lanzó el acuerdo marco dividido en once lotes diferentes. El objetivo del Gobierno fue seleccionar suministradores y productos para hacer frente a la pandemia y fijar las condiciones a las que se ajustaban los suministros. Los lotes englobaban batas, guantes, gafas, mascarillas, test moleculares Covid-19 y kits de extracción.

El importe económico total de la adquisición ascendió a 2.578,7 millones de euros (IVA y prórroga incluidos) para casi 3.700 millones de unidades de producto. En cuanto al número de empresas presentadas en plazo, se contabilizaron más de 150 compañías, que sumaron un total de 475 ofertas a por los once lotes. Una vez concluido el proceso, el acuerdo marco se adjudicó a 72 empresas, que ofertaron 166 productos. En el proceso de evaluación participaron expertos designados por las comunidades autónomas, por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), por el Instituto de Salud Carlos III y por el Centro Nacional de Medios de Protección (Cnmp) dependiente del Instituto Nacional de Salud y Seguridad en el Trabajo, así como el equipo técnico del Ingesa.

El importe asciende a 2.578,7 millones de euros para casi 3.700 millones de unidades de producto.

Este megacontrato se licitó dos veces porque la primera vez se tuvo que anular debido a un error en la redacción de los pliegos. Por culpa de esto, más la complejidad del proceso, la reserva sanitaria se retrasó hasta casi cien días.

El origen de esta reserva estratégica se remonta al 22 de marzo, cuando el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la anunció en rueda de prensa. La licitación no se publicó hasta el 22 de julio, cuatro meses después. Y no se adjudicó hasta más de siete meses después. No obstante, esta licitación es la más cuantiosa de toda la pandemia.

El Ministerio de Sanidad destacó que al ser un procedimiento agregado para toda España se estimaba un ahorro de más de 300 millones de euros. La licitación tiene una duración de un año con posibilidad de prórroga por un segundo ejercicio.