Geni y la Fundación Freno se suman a la lucha contra el ictus

Venciendo al ictus. El Grupo Español de Neuroradiología Intervencionista (Geni) y la Fundación Freno se unen en la lucha contra el ictus. La colaboración tiene como objetivo desarrollar e impulsar proyectos sobre el conocimiento del ictus y sensibilizar a la sociedad de la prevención de esta enfermedad cerebrovascular.

Ante esta enfermedad es importante recibir tratamientos y técnicas adecuadas en el menor tiempo posible con el objetivo de reducir secuelas generadas y mejorar la calidad de vida de los pacientes y de su entorno.

Informar a la población sobre esta enfermedad es clave para la lucha contra el ictus. Sólo esta dolencia afecta a más de 120.000 personas a escala nacional cada año y figura como la principal causa de muerte en las mujeres a escala mundial y la primera causa de discapacidad en los adultos.

En España, 120.000 personas sufren esta enfermedad

Juan Macho, presidente del Geni, explica que “en 2022 se han tratado a casi 7.300 pacientes con ictus graves en España. Esto ha supuesto un enorme esfuerzo para nuestro grupo profesional compuesto actualmente por menos de 200 especialistas en todo el estado y supone un inquietante desafío profesional ante la escasez de profesionales completamente formados, la complejidad y tiempo necesario para la formación de nuevos expertos y la necesidad de expandir la oferta de estos tratamientos en todos los lugares y a todas las horas del día”.

En el ictus cada minuto cuenta, por eso es importante prevenir está enfermedad ante la presencia de cualquier síntoma como pueden ser la parálisis facial, pérdida de fuerza en un brazo y la alteración repentina del habla para expresarse. Según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), más del 50% de afectados por esta enfermedad fallecen por las secuelas y un 35% de estos casos se producen en edad laboral. El 90% de los casos se podrían evitar con la detección precoz, la adecuada prevención de los factores de riesgo y un estilo de vida saludable.

Julio Agredano, presidente de la Fundación Freno al Ictus, destaca que “el paciente tiene que recibir en el menor tiempo posible los tratamientos y técnicas que van a permitir que haya un menor grado de secuelas, provocando así una menor discapacidad y una mayor autonomía y calidad de vida del afectado”.

Es fundamental reducir el impacto de la enfermedad en nuestra sociedad con una correcta y rápida actuación ante un caso de ictus para mejorar el pronóstico y reducir posibles secuelas, que afectarían seriamente a la calidad de vida de los afectados.