El ‘gap’ de la hipertensión: más de cinco millones de personas sin tratar en España

Una bolsa sin tratar de más de cinco millones de personas. De los casi diez millones de personas que tienen hipertensión en España, apenas seis millones están diagnosticados y sólo cinco millones están tratados, según un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS). La entidad apunta que, para llegar a un mínimo del 50% de pacientes controlados, casi dos millones de personas deberían ser tratadas de forma efectiva.

El dato tiene en cuenta personas de entre 30 años y 79 años. En esta franja de edad, se estima que unos 9,9 millones de españoles padecen hipertensión, aunque de ellos sólo el 65% están diagnosticados, con una incidencia sensiblemente mayor entre las mujeres.

El primer gap se da entre los diagnosticados y los tratados, que llegan sólo a un 54% del total, diez puntos menos. Mucho menor es la tasa de pacientes con hipertensión controlada, una cuota que se sitúa en el 31%. Para que al menos la mitad de los pacientes estuvieran controlados, haría falta que 1,7 millones de personas más fueran tratadas de forma efectiva.

Los datos que se tienen en cuenta son de 2019. Ese año, en España murieron 427 personas como consecuencia de esta enfermedad. La OMS ha apuntado que, si se toman las medidas recomendadas para llegar al 50% de controlados, se evitarán 101.000 muertes hasta 2040 en el país.

A escala mundial, el Informe mundial de la OMS sobre la hipertensión: la carrera contra un asesino silencioso ha apuntado que cuatro de cada cinco personas con hipertensión no reciben un tratamiento adecuado. De hecho, el mismo estudio ha confirmado que casi la mitad de los pacientes afectados por la enfermedad desconocen que la padecen. Sin ir más lejos, un 75% de las personas con esta enfermedad viven en países de renta baja y media.  

Según el estudio de la OMS, casi la mitad de los pacientes afectados por hipertensión no saben que padecen la enfermedad

Respecto al negocio farmacéutico, diversas compañías han apostado en los últimos meses por impulsar los productos específicos contra la hipertensión. En febrero del año pasado, la farmacéutica catalana Ferrer llegó a un acuerdo con United Therapeutics para la distribución de Tyvaso (treprostinilo), un producto farmacéutico que combina fármaco y dispositivo para tratar la hipertensión pulmonar. Ferrer consiguió ser designada como distribuidora y comercializadora en exclusiva a escala mundial de este medicamento, a excepción de Estados Unidos, Canadá, Japón, China e Israel.

De hecho, entre los diez medicamentos más caros que financia la sanidad pública española, según la clasificación de Diario Sur se encuentra en la lista el treprostinilo, con un coste total de 19.590 euros por paciente. Treprostinilo Ferrer actúa de manera similar al efecto que tienen las prostaciclinas naturales, que son sustancias similares a las hormonas que reducen la tensión arterial relajando los vasos sanguíneos, de modo que estos se ensanchan y permiten que la sangre circule con mayor facilidad.

A escala internacional, en julio de este año Roche se asoció con la compañía estadounidense Anylam para el desarrollo y comercialización de un nuevo medicamento para tratar la hipertensión en pacientes con alto riesgo cardiovascular. El fármaco, denominado Zilesbesiran, es un tratamiento que todavía se encuentra en fase II, aunque ha logrado una reducción constante y duradera de la presión arterial durante 24 horas.

Por último, AstraZeneca también se reforzó en esta división con la compra el pasado febrero de la biofarmacéutica estadounidense CinCor Pharma, que le permitió agregar a su cartera el fármaco baxdrostat, un inhibidor de la aldosterona sintasa (ASI) para reducir la presión arterial en la hipertensión resistente al tratamiento.