Able abre una ronda de 750.000 euros para conseguir el marcado CE

Able aspira a entrar en el mercado español y alemán. Para conseguir este hito, la empresa ha abierto una ronda de financiación de 750.000 euros con el objetivo de financiar la consecución del marcado CE de la Unión Europea (UE), según ha explicado Alfons Carnicero, cofundador y consejero delegado de Able, a PlantaDoce. Parte de los fondos ya están comprometidos gracias a la participación del Banco Sabadell.

La start up con sede en Barcelona que desarrolla exoesqueletos robóticos para personas con discapacidades, ha rehecho sus planes iniciales tras la pandemia y, tras esta ronda puente, abrirá una Serie A de hasta tres millones de euros. De cara a 2023, la compañía tiene previsto empezar a comercializar sus productos en Alemania y España.

De Alemania, Carnicero resalta el hecho que la compañía haya realizado parte de los estudios clínicos en el Hospital de Heidelberg. En España, Able también ha trabajado con el Institut Guttman de Badalona y el Hospital Asepeyo Barcelona de Sant Cugat.

El exoesqueleto desarrollado por Able está destinado para pacientes con lesiones medulares. Estas personas, sin fuerza ni sensibilidad en las piernas, se colocan el dispositivo, que es quien hace la fuerza tras detectar los movimientos que desea hacer el usuario que lo utiliza. 

Able ya cerró una ronda de financiación de 700.000 euros en 2019

Actualmente hay cinco millones de personas con lesiones medulares en todo el mundo y esta cifra se incrementa con medio millón de personas más cada año, según los cálculos de Able. El dispositivo promueve su movilidad y pretende poner sobre la mesa un enfoque holístico, ya que las lesiones medulares derivan en otros problemas de salud asociados como cardiovasculares o psicológicos.

Able se fundó en octubre de 2018 por iniciativa de Carnicero, Alex García y Josep Maria Font tras una investigación iniciada en 2013 en la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) con el objetivo de desarrollar un dispositivo ligero, fácil de usar y que no resultara una gran carga económica.

En noviembre de 2019, la compañía ya cerró una ronda de financiación de 700.000 euros, en la que participó la entidad de capital riesgo BStartup Health, el programa del Banco Sabadell dedicado a start ups de salud.

La compañía invirtió los fondos recaudados en la transformación y evolución del entonces prototipo del exoesqueleto. Able tiene su sede en el Centre de Recerca en Enginyeria Biomèdica de Barcelona y emplea a doce trabajadores a jornada completa y dos más a tiempo parcial.