Estados Unidos provoca un deterioro de activos de 247 millones de euros en Almirall

La crisis de Aqua Pharmaceuticals pasa factura a Almirall, provocando un deterioro de activos de 247 millones de euros en la compañía y arrastrándola hacia su peor resultado desde que cotiza: 304 millones de euros en números rojos en 2017.

El laboratorio, controlado por la familia Gallardo, tiene ahora tres prioridades, como son recuperar el negocio de Estados Unidos, que se desplomó más de un 50%, la salida al mercado de tres medicamentos superventas y el crecimiento mediante adquisiciones.

El primer objetivo de Peter Guenter, nuevo consejero delegado de Almirall, es recuperar el negocio en Estados Unidos. La multinacional farmacéutica vio como sus ingresos cayeron un 61%, hasta 81,9 millones de euros. El principal motivo del descenso es el lanzamiento, por parte de la competencia, de un genérico de su medicamento Acticlate, que redujo sus ventas de 90 millones de euros a 30 millones de euros.

Almirall tiene muchas expectativas depositadas en sus próximos tres lanzamientos. Sus ventas pico están previstas en 500 millones de euros. Por ahora, la empresa ha iniciado el lanzamiento de Skilarance en Europa, cuyo negocio estimado es de 50 millones de euros.

El informe de remuneración del consejo de administración, remitido ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (Cnmv), indica que Guenter percibió 2,14 millones de euros el año pasado en concepto de “incentivo de contratación” por fichar como primer ejecutivo de la farmacéutica catalana.