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Objetivo, aplacar el Covid-19: más de 51.000 camas privadas, al servicio del sistema sanitario en España

La sanidad privada en España aporta más de 400 hospitales y dispone de más de 51.000 camas para atender a la población.

A. Escobar

16 mar 2020 - 05:00

Objetivo, aplacar el covid-19: más de 51.000 camas privadas, al servicio del sistema sanitario en España

 

El objetivo es uno, aplacar cuanto antes al coronavirus (covid-19). Tras la comparecencia el pasado sábado por la noche del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la que se decretó el estado de alarma, toda la sanidad del país depende ahora directamente del Ejecutivo. De hecho, las palabras de Sánchez fueron “todos los centros sanitarios públicos y privados quedan bajo dependencia del Ministro de Sanidad”. Esta situación excepcional se traduce en que el sistema privado responde ante la amenaza con más de 440 hospitales y más de 51.000 camas, según los datos actualizados del departamento encabezado por Salvador Illa. En el territorio nacional existen poco más de 800 centros hospitalarios.

 

Esta colaboración público-privada en salud comenzó hace dos semanas. De manera contundente, el Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (Fundación Idis) publicó un comunicado en el que consideraba que, “dada la seriedad de la situación, no deberían sembrarse dudas en la sociedad ni producirse este tipo de conjeturas que cuestionan la relevancia del sector sanitario privado ante problemas de esta naturaleza”.

 

De hecho, el presidente de la entidad y también del grupo HM Hospitales, Juan Abarca, explicaba a PlantaDoce que la sanidad privada debe hacer “lo que está haciendo hasta el momento, atendiendo a los pacientes y a los casos de sospecha que le llegan y colaborando estrechamente con las autoridades sanitarias en todos los ámbitos y frentes”. Para el directivo, “la suma de todos es lo que hará que consigamos afrontar este nuevo reto y detener la expansión del coronavirus en nuestro país”.

 

Así, son cerca de 447 hospitales de titularidad privada los que existen en España (donde se incluyen centros de mutualidades de trabajo, privado benéfico o no benéfico). Grupos como Quirónsalud, HM Hospitales, Vithas y Hospiten son los principales players del sector. Por poner un ejemplo, la compañía presidida por Abarca cuenta con más de “ochenta pacientes ingresados bajo cobertura de las aseguradoras”, según declaraba él mismo en sus redes sociales.

 

 

 

Pero no sólo son los grupos hospitalarios de titularidad privada los que aportan su estructura para solventar la crisis provocada por la pandemia. Pequeñas y medianas clínicas y centros con equipamientos y espacios para intervenciones quirúrgicas también han alzado su voz.

 

Es el caso del grupo Otsu, grupo que controla las clínicas de estética Dorsia en España. En un comunicado, la empresa defiende la decisión de posponer toda intervención “que no ponga en riesgo la salud de sus pacientes durante las próximas semanas”. Además, desde la empresa destacan que “tras el anuncio del Estado de alarma del sábado hemos puesto a disposición de las autoridades sanitarias del Estado, así como de las comunidades autónomas, nuestros quirófanos de Madrid para atender todos los casos que sean necesarios ante la crisis sanitaria del covid-19”. Igualmente, “hemos trasladado a nuestra red de clínicas la necesidad de posponer todas las cirugías no urgentes para liberar a los profesionales sanitarios, así como espacios y material sanitario, y que este sea destinado a aquellos que de manera urgente van a necesitarlos”, concluye.

 

Y es que la sanidad privada española cuenta con más de 51.500 camas hospitalarias en las que pueden ser atendidos los pacientes con covid-19. Por el momento, y según los últimos datos de Sanidad actualizados a domingo 15 de marzo, hay 7.753 casos confirmados en España y más de 250 fallecidos.


 

 

La aportación de la sanidad privada es clave. Según el estudio La aportación de la sanidad privada en España 2019 del Idis, el gasto sanitario privado alcanzó 28.858 millones de euros en 2016, una cifra que representa el 2,6% del PIB y que supone un incremento de 573 millones de euros respecto al año anterior.

 

En relación con el gasto sanitario privado per cápita, éste ha evolucionado de 540 euros registrados en 2016 a 573 euros que alcanzó en 2018, lo que se traduce en 33 euros más que en 2016, de los que 431 euros corresponden a gasto de bolsillo y 142 a gasto en aseguramiento.