Smart Dyspnea abre una ronda de financiación de 300.000 euros

Smart Dyspnea busca capital privado. La compañía, especializada en la disnea, ha abierto una ronda de financiación de 300.000 euros a través de la plataforma de crowdfunding Capital Cell. La empresa ya tiene comprometidos más de 40.000 euros por parte del grupo Big Ban tras ser una de las ganadoras de la Challenge Covid.

La compañía desarrolla un sistema de detección precoz de la saturación de oxígeno a través de la voz mediante algoritmos de inteligencia artificial que permite realizar un seguimiento e identificación del grado de disnea mediante la aplicación de un test validado clínicamente, con un 91% de fiabilidad. La disnea es la sensación de falta de aire.

La empresa, que ya tiene un producto listo para ser comercializado, se dirige también a los pacientes con falta de aire, un mercado potencial en todo el mundo de más de 400 millones de personas, con enfermedades como el asma, la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (Epoc) o el Covid-19, entre otras.

Raúl Ferrer es el consejero delegado de Smart Dyspnea. El directivo es fisioterapeuta y tiene una amplia trayectoria en el desarrollo de iniciativas de salud digital y en proyectos de innovación relacionada con la salud y nuevas tecnologías. En el equipo directivo también se encuentran Manuel Sánchez-Montañes, Frederich Llordachs, Sergio Lerma e Ignacio Gutiérrez.