Entorno

El insomnio crónico genera pérdidas anuales de 372.000 millones en países de renta alta

La enfermedad del trastorno del sueño afecta a una de cada dos personas en todo el mundo y tiene un impacto negativo con relación a los costes económicos en temas sanitarios en países con un alto PIB.

PlantaDoce

25 jul 2023 - 13:24

sueño

 

A tomar precauciones. El insomnio crónico genera pérdidas anuales de 372.000 millones de euros en países de renta alta, según un informe de Rand Europe.

 

El estudio ha analizado la carga social y económica de esta enfermedad, más allá del impacto en la salud y la atención sanitaria. El insomnio es el principal trastorno del sueño donde su presentación más grave es el de tipo crónico y es cuando la persona que lo padece encuentra dificultades para conciliar el sueño al menos tres noches por semana durante tres meses.

 

El informe destaca que una de cada dos personas sufre este tipo de trastorno, llegando a la cifra de 172 millones de personas que padecen esta patología a escala mundial. El doctor Marco Hafner explica que “la falta de un sueño reparador y de calidad, debido al insomnio crónico afecta directamente a la salud mental y física y repercute en la productividad del individuo afectando negativamente al empleador, empresas y en la economía del país y mundial”.

 

 

El insomnio se ha asociado a un impacto económico anual significativo debido a la pérdida de productividad en el puesto de trabajo. Los adultos con insomnio son más propensos al absentismo laboral y son menos productivos en términos de costes indirectos. Asimismo, los costes indirectos generan pérdidas de productividad laboral anuales de 1.300 millones de euros. El informe se realizó en 16 países de la organización entre los que se encuentran: Francia, Italia, Alemania, España, Reino Unido, Estados Unidos y Canadá.

 

Las proyecciones económicas del estudio encuentran que eliminar los efectos del insomnio mediante políticas de prevención, educación, diagnóstico rutinario y tratamiento temprano aumenta la productividad en el trabajo y, por consiguiente, tiene un efecto positivo en el producto interior bruto (PIB).

 

El estudio pretende que para reducir estos gastos se debe incorporar en las estrategias nacionales de salud pública el sueño, a impulsar campañas de salud pública que hagan hincapié en la importancia de una adecuada higiene del sueño y a implementar la detección precoz sistemática del trastorno de insomnio en las visitas médicas de rutina mediante screening.

 

“Cualquier intervención para reducir el insomnio, ya sea a nivel de prevención primaria, secundaria o terciaria, sería de gran importancia para la salud pública y las organizaciones, y también promovería una mejor salud y bienestar de los empleados. Establecer programas de prevención de este riesgo laboral es clave para las organizaciones”, destaca Hafner.