El sector de la reproducción asistida en España factura un 6% menos en 2020

El sector español de la reproducción asistida da un paso atrás en el año del Covid-19. Los centros privados especializados en estos procedimientos generaron un volumen de negocio agregado de 460 millones de euros en 2020, lo que supuso un descenso del 5,9% respecto a 2019, según se desprende del Observatorio Sectorial DBK de Informa.

El valor total de los tratamientos de reproducción asistida realizados en España se situó en torno a 590 millones de euros en 2020, correspondiendo el 78% a centros especializados de titularidad privada, el 11,8% a hospitales públicos y el 10,2% a clínicas privadas, teniendo en cuenta en este último caso sólo el volumen de negocio generado con recursos propios.

Esta evolución, que rompe la tendencia sostenida de crecimiento de años anteriores, fue el reflejo del impacto de la pandemia en la actividad, que implicó el cierre temporal de muchos centros y la limitación de afluencia posterior debido a los protocolos de seguridad y el retraimiento de una parte de la demanda.

El 78% del valor total de los tratamientos corresponden a centros privados

Actualmente se encuentran operativos 280 centros privados especializados, concentrando Cataluña, Andalucía, Comunidad Valenciana y Madrid alrededor del 70% del total de forma conjunta. En los últimos años se aprecia una tendencia a la concentración, como consecuencia de las operaciones corporativas lideradas por algunos de los principales operadores del sector.

Los cinco primeros operadores reunieron en 2019 el 56% del volumen de negocio agregado de los centros especializados. La cuota de mercado conjunta del grupo de los diez primeros superó ligeramente el 70%. En 2021 se espera un repunte de la demanda, sustentado en la puesta en marcha de tratamientos aplazados en el ejercicio anterior, de manera que el volumen de negocio generado por los centros de reproducción asistida podría recuperar los niveles alcanzados en 2019.

La tendencia a la baja de la tasa de fecundidad, motivada por la ampliación de la edad media de la primera maternidad en las mujeres españolas, sigue configurando un marco propicio para que la demanda de servicios de reproducción asistida continúe creciendo a medio plazo.