El virus que alimentó el presupuesto en salud: TAC del Covid en España tras dos años de pandemia

Dos años desde que la historia cambió. El 14 de marzo de 2020, el Gobierno hizo uso del mecanismo previsto en el artículo 116 de la Constitución y activó el estado de alarma con el objetivo de “garantizar la protección de la salud de los ciudadanos, la contención de la enfermedad y el refuerzo del sistema de salud pública”, según el Boletín Oficial del Estado (BOE).

A lo largo de estos dos años, la propagación del Covid-19 ha tenido consecuencias múltiples que han afectado tanto al ámbito sanitario como al socioeconómico. Desde marzo de 2020 se han decretado confinamientos cuestionados por su encaje constitucional, se ha llevado a cabo la mayor campaña vacunal de la historia y la digitalización ha recibido un impulso que parece definitivo.

La salud digital aprovecha el momentum

La expansión del virus condicionó el modus vivendi de la población, priorizando el distanciamiento físico. Esta circunstancia actuó como un catalizador del crecimiento que ya se venía experimentando los años anteriores en el sector de la salud digital. A escala mundial, en el momento de máximo impacto del coronavirus, durante la primavera de 2020 la utilización de los servicios de salud digital llegó a ser 78 veces mayor que antes de la pandemia. En 2021, el uso de estas herramientas se estabilizó en cifras 38 veces mayores que en enero de 2020.

La utilización de los servicios de salud digital llegó a ser 78 veces mayor que antes de la pandemia

El Gobierno reaccionó con la creación de la Secretaría General de Salud Digital en agosto de 2020, con el objetivo de abordar los proyectos de modernización, innovación, mejora y transformación del Sistema Nacional de Salud (SNS). Este ente recibirá 26,8 millones de euros procedentes de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) en 2022, lo que supone un incremento del 88,6% respecto a la dotación del último ejercicio. En 2021, los presupuestos proyectaron una inversión de 14 millones de euros.

En este subsector, la colaboración público-privada también se hizo patente en octubre de 2020, cuando la sanidad privada empezó a colaborar con el Ministerio de Sanidad para desplegar una estrategia conjunta en salud digital. Desde entonces, la Alianza de la Sanidad Privada Española (Aspe) y la Fundación Idis participan en el desarrollo de los servicios digitales dentro del SNS, impulsando la analítica de datos y la interoperabilidad electrónica.

La vacuna récord

Un pinchazo para la esperanza. El 27 de diciembre de 2020 pasó a la historia como el día en el que España inició la campaña de vacunación contra el Covid-19. El hecho toma mayor relevancia si se tiene en cuenta que el pistoletazo de salida sucedió apenas un año después de la detección de los primeros casos en Wuhan (China). A partir de ese momento, un porcentaje elevado de la población del país, dividida en distintos grupos en función de su edad, su situación laboral o los factores de riesgo, se inmunizaron de forma progresiva contra el coronavirus.

Pfizer ha sido la empresa que mayor número de vacunas ha administrado a España, con 68,6 millones de dosis

Actualmente, España ha recibido de las distintas farmacéuticas 98 millones de dosis, de las que ha administrado 92,7 millones. Pfizer ha sido la empresa que mayor número de vacunas ha administrado, con 68,6 millones de dosis, lo que supone un 70% de todas las inmunizaciones. Por su parte, Moderna, AstraZeneca y Janssen representan el 18,9%, 9% y 2,1% de las vacunaciones restantes.

Hasta ahora, existen diez vacunas contra el Covid-19 aprobadas en todo el mundo, cinco de las cuales de uso en Europa. Estas dosis cuentan con el visto bueno de la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés). En paralelo, hay 147 ensayos clínicos activos, de los que 33 se encuentran en la fase final de su investigación.

En cuanto a los tratamientos contra el Covid-19, como dosis orales o sueros, actualmente hay siete tratamientos autorizados en la Unión Europea (UE) orientados a tratar el coronavirus. Además, se están llevando a cabo más de 1.600 ensayos clínicos en todo el mundo, según cifras de la OMS. Estos tratamientos fueron los primeros en usarse durante los primeros compases de la pandemia, ya que se aprovecharon medicamentos existentes para otras patologías para combatir el coronavirus.

2021 da la bienvenida al Perte en salud

A lo largo de estos últimos dos años, otro de los grandes proyectos del sector en España ha sido el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (Perte) en sanidad. Esta iniciativa contempla una inversión de 1.469 millones de euros entre 2021 y 2023.

De estos 1.469 millones de euros, el sector público aportará 982 millones de euros, mientras que el sector privado invertirá 487 millones de euros. Esta iniciativa tiene cuatro objetivos: posicionar el país como líder en innovación y terapias avanzadas, impulsar la implementación equitativa en medicina de precisión, desarrollar el sistema de salud digital y reforzar la atención sanitaria primaria.

El proyecto engloba y coordina dos agendas de inversión específicas: una, dirigida al tejido científico; otra, dirigida al tejido empresarial, fomentando las alianzas científico-empresariales. Estas agendas se articularán a través de convocatorias, la creación de una estructura de inversión, desarrollo e innovación (I+D+i) para terapias avanzadas en red, la puesta en marcha de un vehículo de inversión público-privada en terapias avanzadas con participación de empresas con capacidad de producción en España, elementos de coordinación e identificación temprana de capacidades y necesidades del SNS, compra pública innovadora y precomercial, iniciativas privadas, proyectos coprogramados y licitaciones públicas.