España, a la cola de Europa en camas hospitalarias

España tiene uno de los mejores sistemas de salud pero, a su vez, es uno de los países con menos camas hospitalarias. En 2017, el Estado disponía de tres camas por cada mil habitantes, una cifra que sólo es inferior en Dinamarca, Reino Unido y Suecia. En 2001, esta ratio era de 3,6 plazas, según el informe Los sistemas sanitarios en los países de la Unión Europea, publicado recientemente por el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social.

España se encuentra muy por debajo de la media de la Unión Europea, con cinco camas por cada mil habitantes en 2017. Sin embargo, la tendencia en el conjunto de la UE también viene marcada por una caída en el número de camas hospitalarias. En 2001, los países que forman parte de la comunidad disponían de 6,3 plazas por cada mil residentes.

España es, a su vez, uno de los países donde sus habitantes acuden menos a los centros de salud. Según los últimos datos, el 11,5% de la población recibió un alta hospitalaria en 2017, un porcentaje que sólo es inferior en Portugal y Chipre. En el conjunto de la UE, el 17,2% de sus habitantes ingresó en un hospital.

El 11,5% de la población española acudió a un hospital en 2017, un porcentaje que sólo es inferior en Portugal y Chipre

El informe del Ministerio de Sanidad también pone de manifiesto los avances que se han realizado en el ámbito del reingreso hospitalario. Según los últimos datos, la estancia media de los pacientes españoles fue de 7,3 días, ligeramente por debajo de la media de la Unión Europea. Dieciséis años atrás, dicha estancia era de 8,8 días.

El país, además, se presenta como el segundo territorio con menos barreras para acceder a la atención médica. En concreto, sólo el 0,2% de la población declara que no puede ser tratada por barreras económicas, geográficas o por las listas de espera. En este sentido, únicamente Austria se encuentra en una mejor posición.

Por otra parte, el documento elaborado por el Ministerio de Sanidad pone en relieve el porcentaje del Producto Interior Bruto (PIB) que se destina a gasto sanitario público y privado. En España, un 8,9% de estos recursos van destinados a la salud, un porcentaje por encima de la media europea.  

Francia es el país que destina más ingresos a la salud, concretamente un 11,3% de su PIB. A continuación se encuentran Alemania y Suecia, con porcentajes de 11,2% y del 11%, respectivamente. Al otro extremo están Letonia, Luxemburgo y Rumanía, donde el porcentaje del PIB destinado a salud es inferior al 6%.