Entorno

Ramsay Santé, desde Francia a la conquista del sector privado europeo

El grupo sanitario francés, propiedad del gigante australiano Ramsay Santé Health desde 2013, ha desembarcado este año en Italia, que se suma a una lista de países en la que también figuran Suecia, Dinamarca, Noruega y Francia.


Albert Martínez

11 oct 2022 - 04:58

Ramsay Santé, desde Francia a la conquista del sector privado europeo.

 

Ramsay Santé se ha convertido en los últimos años en el buque insignia del sector hospitalario francés, desde donde ha decidido dar el salto a Suecia, Noruega, Dinamarca e Italia. El grupo sanitario con sede en París (Francia), ofrece servicios de hospitalización privada y atención primaria, tratando cada año a más de siete millones de pacientes en sus 350 establecimientos.

 

La compañía divide el total de sus actividades en tres áreas: una de cirugía y obstetricia, en la que la empresa se ha establecido al frente del mercado francés, con más de 120 establecimientos; otra de postratamiento y rehabilitación, con 19 clínicas propias en Europa y una última área destinada a la salud mental, en la que, con 22.000 pacientes en Francia, copa el 20% de la cuota de mercado de la hospitalización psiquiátrica privada en el país galo.

 

Asimismo, la empresa ha cerrado contratos con los servicios de salud pública de los cinco países en los que opera. Sólo en Suecia, el segundo mercado más fuerte de Ramsay Santé, la compañía cuenta con más de cien acuerdos de colaboración con el servicio de salud pública y la red sanitaria del territorio.

 

 

 

Los orígenes de Ramsay Santése remontan a 1987, cuando fue fundada bajo el nombre de Generale de Santé por la Compagnie générale des eaux, una empresa de distribución de agua en París. Durante sus 35 años de historia, la empresa ha experimentado diversos cambios de manos en su accionariado. En 1997, fue vendida al fondo de inversión luxemburgués Cinven, hasta que en 2007, tras haber salido a bolsa, pasó a manos de la familia De Agostini y el Doctor Antonino Ligresti, que controlaban el 87% del capital.

 

Ya en 2013, la extinta Generale de Santé se fusionó con el grupo australiano Ramsay Santé Health Care, actuales propietarios del 52% de las acciones de la empresa. Este gigante del sector, que cuenta con más de quinientos centros sanitarios repartidos entre once países, es el mayor operador privado de Oceanía y está presente en el sector sanitario francés desde que en 2010 comparara ocho clínicas privadas con el apoyo de Crédit Agricole.

 

Para apuntalar su expansión por Europa, en 1994 el grupo hospitalario entró en el mercado sueco tras comprar el Hospital Lundby en Gotemburgo (Suecia). Se fundaba así la filial de la compañía, Capio, que en 1997 adquirió el grupo Volvat noruego, en lo que fue el segundo mercado internacional que asaltó la compañía. Tras él, llegaron Dinamarca y Alemania, aunque la aventura en el país germano no fructificó y Generale de Santé se retiró de aquel mercado. En el último año, la empresa ha desembarcado en Italia, con la adquisición de un centro médico Cadra Centro, en Omega, ubicado en la región piamontesa del país transalpino.

 

 

 

Actualmente,  Ramsay Santé está dirigida por Pascal Roché y es, en su mayoría, propiedad de Ramsay Santé Health, que fue fundada en 1964 en Australia por Paul Ramsay e ingresa 12.456 millones de dólares anuales. Bajo la dirección de Michael Siddle, quien fuera director fundador de la empresa junto a Ramsay, el gigante australiano cuenta con más de 80.000 empleados en todo el mundo y en el último ejercicio obtuvo beneficios de casi 500 millones de dólares, aupados por el impacto de la pandemia.

 

El segundo mayor accionista de la empresa es el grupo Predica, con casi un 40% del total de la compañía. Predica es una filial de la aseguradora Crédite Agricole, la empresa a través de la que Generale de Santé entró en el sector sanitario francés en 2010. 

 

Por su parte, Ramsay Santé cerró el ejercicio 2022, finalizado a 30 de junio de este año, con unos ingresos de 4.301 millones de euros, un 6,9% más que en el mismo periodo del año anterior, con un beneficio neto de 118 millones de euros. Sin embargo, la deuda de la compañía asciende a 3.710 millones de euros y ha cerrado dos centros sanitarios en Francia en el periodo, pese a aumentar un 3,2% su número total de pacientes.

 

El resultado bruto antes de explotación (ebitda) de Ramsay Santé en el periodo fue de 658,4 millones de euros, un 2,3% más que en 2021. Por política empresarial, Ramsay Santé invierte cada año al menos 200 millones de euros en la renovación de sus establecimientos, con la aplicación de nuevas tecnologías quirúrgicas y de imagen y la modernización de sus recintos.