2021: Un plan milmillonario para transformar la sanidad en España

Especial 2021, el año de la vacuna

La salud ya cuenta con un plan que dibujará las líneas maestras, de recuperación y transformación, del sector para los próximos años. Un plan milmillonario que surge para dar respuesta a las nuevas necesidades de pacientes y profesionales y como dinamizador de la economía, en un momento cuanto menos delicado por el impacto del Covid-19. El Proyecto Estratégico de Recuperación y Transformación Económica (Perte) para la Salud de Vanguardia, que es el nombre que recibe esta iniciativa, contemplará una inversión superior a 1.400 millones de euros entre 2021 y 2023, según anunció a mediados de noviembre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una rueda de prensa en La Moncloa.

El Perte se concibe como una propuesta país de interés general para el conjunto de la economía por su capacidad de arrastre y potencial transformador y para la sociedad, impulsando el empleo de calidad y mejorando la salud de la población española a través del conocimiento científico, la innovación sanitaria de vanguardia y los datos como vectores de transformación. Este plan deberá actuar como elemento vertebrador y tractor para consolidar la protección de la salud colectiva e individual frente a cualquier amenaza, independientemente de su escala, como uno de los elementos de la recuperación social y económica.

“Este plan deberá actuar como elemento vertebrador y tractor para consolidar la protección de la salud colectiva e individual”

El sector de la Salud en España se presenta como un gran dinamizador de la economía, con un claro potencial de desarrollo e innovación. El gasto sanitario público en 2019 en España supuso 75.025 millones de euros, lo que representa el 6% del Producto Interior Bruto (PIB) del país. La media anual de crecimiento del gasto sanitario público en el quinquenio 2015-2019 fue de un 3,4%.

El fin principal del Perte es fomentar la generación sostenible de tejido industrial rejuvenecido, resiliente y próspero, y la creación de empleo de calidad transgeneracional a través de la colaboración público-privada, orientado a la protección de la salud colectiva e individual. 

Cuatro objetivos, cinco líneas

El Perte se articula en torno a cuatro objetivos estratégicos y cinco líneas diferentes. El primer objetivo es impulsar la implementación equitativa de la medicina personalizada de precisión en el Sistema Nacional de Salud (SNS), como herramienta para hacer frente a los nuevos retos sanitarios, y a su interacción con retos medioambientales, demográficos y socioeconómicos, favoreciendo el refuerzo, desarrollo y creación de empresas competitivas basadas en la generación de conocimiento. El segundo objetivo es promover el desarrollo de terapias avanzadas y otros fármacos innovadores o emergentes y facilitar su transferencia a la práctica clínica. El tercero es desarrollar un sistema de datos innovador que permita la recogida, tratamiento, análisis y explotación de los datos provenientes de las distintas fuentes para mejorar la prevención, diagnóstico, tratamiento, rehabilitación e investigación orientada a la salud. El último de los objetivos es impulsar la transformación digital de la asistencia sanitaria, mediante la aplicación de tecnología a todas las actividades que impliquen relación con la ciudadanía y de gestión de los recursos en todos los ámbitos asistenciales. 

En cuanto a las líneas, estas son: fortalecer y desarrollar las capacidades de los centros del SNS, invertir en el desarrollo, digitalización y modernización de la capacidad industrial, diseñar y desplegar instrumentos y estructuras que aseguren la colaboración y la coordinación entre el tejido científico y el tejido empresarial, reforzar la cohesión territorial y fortalecer la formación entre distintos actores.

El 67% del Perte procede del sector público

El Perte Salud de Vanguardia prevé una inversión total de más de 1.469,3 millones de euros entre 2021 y 2023, con una contribución del sector público de 982,4 millones de euros (el 67%) y una inversión privada inicial de 486,8 millones de euros (33%). Este proyecto estratégico engloba y coordina dos agendas de inversión específicas: una, dirigida al tejido científico; otra, dirigida al tejido empresarial, fomentando las alianzas científico-empresariales.

Estas agendas de inversión se articulan a través de convocatorias, la creación de una estructura de investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) para terapias avanzadas en red, la puesta en marcha de un vehículo de inversión público-privada en terapias avanzadas (sociedad mercantil público-privada) con participación de empresas con capacidad de producción en España, elementos de coordinación e identificación temprana de capacidades y necesidades del SNS, compra pública innovadora y precomercial, convenios con comunidades, iniciativas privadas y proyectos coprogramados y licitaciones públicas.

Más de 12.600 nuevos empleos

Se estima que globalmente el Perte de salud generará una contribución en PIB de hasta 4.335 millones de euros y la creación de hasta 12.688 nuevos puestos de trabajo. Desde el punto de vista de impactos sanitarios se aspira a un ahorro mínimo del 15% en años de vida ajustados por discapacidad o lo que en inglés se conoce como Disability Adjusted Life Years (Dalys) sobre cada una de las patologías vinculadas a las actuaciones de este Perte. A través de este proyecto, el Gobierno espera alcanzar en el próximo lustro los siguientes hitos: la innovación biomédica se consolidará como un potente motor para el cambio de modelo productivo, impulsando el empleo de calidad, el desarrollo económico y el fortalecimiento de tejido industrial; el SNS será un referente mundial en medicina de precisión mediante el uso masivo, inteligente y orientado a la salud de diferentes fuentes de datos (biológicos, ambientales, funcionales, conductuales y otros), la colaboración público-privada será una herramienta de uso cotidiano, la aplicación de tecnologías digitales permitirá ofrecer a las personas una atención personalizada con equidad en el acceso, el desarrollo de nuevas capacidades industriales y la modernización y digitalización de las existentes asegurará un tejido industrial competitivo y la atención primaria y comunitaria digitalmente transformada será integral, accesible, de calidad y equitativa.

Iniciativas en marcha

El Perte permitirá poner en marcha muchas iniciativas durante los próximos años. Entre ellas destaca, por ejemplo, el data lake sanitario. Esto supone la creación de un repositorio de datos alimentado por los diferentes sistemas de información relevantes en Salud y permitirá un análisis masivo e inteligente de los mismos, con capacidad de respuesta en tiempo real, orientado a la protección de la salud, la predicción sanitaria, así como para el incremento en la eficiencia del diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de enfermedades, en las condiciones adecuadas de ciberseguridad. 

El data lake sanitario permitirá la identificación de factores de riesgo, análisis de tendencias, identificación de patrones, predicción de situaciones de riesgo sanitario y programación de recursos para su atención, incluyendo algoritmos de inteligencia artificial (IA), y utilizando nuevas arquitecturas de sistemas escalables y nuevas herramientas de procesamiento y descubrimiento de modelos. La definición de usos se establecerá en fases posteriores del proyecto y se prevé la posibilidad de incorporar a los proveedores sanitarios privados. 

Otro de los puntos que propone el Perte es desarrollar una línea de trabajo bajo el paraguas de compra pública precomercial, con un importe de 36,6 millones de euros, centrada en dos frentes: en el campo de avance en la precisión del diagnóstico, monitorización y tratamiento de patologías de alta prevalencia y en el ámbito de la producción de medicamentos. 

De esta forma, se pondrá a disposición de la comunidad biomédica un instrumento de apoyo al desarrollo y validación de equipamiento de última generación, más allá del estado del arte y de carácter precomercial, para la producción de medicamentos innovadores, equipos de laboratorio, diagnóstico, sistemas robotizados para la automatización completa de los laboratorios o unidades de producción de medicamentos basados en terapias avanzadas. 

El Perte de salud pone el foco en la aceleración de la transformación digital en el sector.

Se licitará el desarrollo de prototipos que servirán para la experimentación adecuada previa a la utilización masiva de este equipamiento. También se destinarán 31,2 millones de euros a la financiación de proyectos relativos a la misión de “impulsar el avance y la capacidad tecnológica de la industria biofarmacéutica española para fomentar actuaciones de I+D en el ámbito de las terapias avanzadas, las vacunas y terapias dirigidas”. En este contexto, un mínimo de 4,5 millones de euros se destinará a proyectos realizados por pymes y también se garantiza la participación de al menos una pyme en cada proyecto en las modalidades Misiones Grandes Empresas. El Instituto de Salud Carlos III participará en la evaluación de los centros de investigación. 

Por otra parte, el Consorcio de Terapias Avanzadas (CTA) facilitará el desarrollo preclínico de medicamentos de terapia avanzada y articulará los nodos de una red de investigación en medicamentos de terapia avanzada en la que participarán centros de investigación y hospitales del SNS.