Madrid invierte 7,6 millones de euros en la prórroga de 425 plazas para ‘seniors’

Apoyo al senior. La Comunidad de Madrid ha invertido 7,6 millones de euros en la prórroga de dos contratos de residencias públicas para mayores. El centro de Villa el Padro ofrecerá 120 plazas residenciales y cuarenta de centro de día, mientras que el centro Plata y Castañar, ubicado en la ciudad de la capital, dispondrá de 220 plazas residenciales y 45 en el turno diurno.

Las residencias proporcionarán alojamiento y manutención, cuidados personales, control y protección y la participación en acciones encaminadas al mantenimiento de sus capacidades funcionales para lograr un envejecimiento activo. Los centros atenderán a pacientes mayores a partir de los sesenta años, 55 en caso de Alzhéimer.

Los centros de día de las residencias sanitarias serán de carácter socio-rehabilitador y estancia diurna para mayores con autonomía reducida. Los médicos y enfermeras desarrollarán una actividad gerontológica y rehabilitadora que comprende las actuaciones propias de la medicina preventiva y asistencial, así como orientación psicológica con el diagnóstico.

Madrid pondrá en funcionamiento más de 400 nuevas plazas en las dos residencias públicas para mayores

La región también está apostando por la teleasistencia digital para los mayores. El principal objetivo de la teleasistencia doméstica avanzada es mejorar la calidad de vida de las personas mayores, asegurando la intervención cuando se tenga una necesidad personal, social y médica. La adjudicación de estos equipos digitales se dará en tres fases.

La primera entrega con la que se atenderán a los usuarios de Madrid sustituirá el parque analógico de teleasistencia por terminales digitales y sistema de sensores entre los que habrá sensores que podrán detectar el movimiento de personas, caídas, dispensadores de medicación o sensores magnéticos para conocer si se abre o no las puertas de la vivienda o de electrodomésticos.

La financiación proviene de fondos europeos. Los beneficiarios dispondrán también de un detector de hábitos domiciliarios que, a través de la medición de valores como la humedad, temperatura, luminosidad o consumo eléctrico, configurarán el patrón que tienen con su vida diaria, ya sea sueño, comidas, salidas y entradas.

Esta inversión se une a los veinte millones de euros invertidos anteriormente en la creación de un centro público residencial para pacientes con ELA. El centro fue construido en la antigua clínica del Hierro, en el barrio de Mirasierra de Madrid. La instalación fue integrada en el centro de media estancia que tiene el Gobierno autonómico proyectado en estas instalaciones que quedaron sin uso tras abrir el nuevo Hospital público Puerta de Hierro Majadahonda.

La instalación ofrece cincuenta nuevas plazas de asistencia integral para pacientes que necesiten un régimen de internamiento permanente como en el de estancia temporal y otras treinta plazas para ambulatorio.