Menos tiempo de explotación e incentivos: receta del Psoe contra el desabastecimiento ‘farma’
Nicolás González Casares defiende que reducir los años de explotación comercial de nuevos fármacos mientras se superan los ocho años de baseline vigentes con pluses puede solucionar retos como el del desabastecimiento comunitario.
27 may 2024 - 05:00
La legislatura del Parlamento Europeo que empezó en 2019 estuvo marcada por el coronavirus, que desplazó completamente las prioridades de los estados miembro de la Unión Europea (UE). Antes de 2020, la salud estaba relegada a poco más que a la mera coordinación de políticas estatales, pero después del impacto del Covid-19 ha cobrado más fuerza que nunca el debate sobre la llamada autonomía estratégica farmacéutica de la UE, o la necesidad de reducir la dependencia extracomunitaria desarrollando una industria propia.
Otra cuestión crucial ha sido la revisión completa de la legislación farmacéutica de la UE, tanto de la directiva como del reglamento europeo que atañen al sector. Una iniciativa polémica, pues ha conllevado una reducción del baseline de años de explotación comercial y protección de datos para nuevos medicamentos, que fue refrendada por el Europarlamento el pasado 10 de abril. Nicolás González Casares, eurodiputado del Partido Socialista Obrero Español (Psoe) a cargo de las cuestiones de salud en la Eurocámara, hace balance de la legislatura saliente y de los retos de la siguiente.
Sobre la revisión de la normativa del farma, González recuerda que en este debate se contraponen los intereses de las compañías del sector cuyo negocio se fundamenta en la innovación y los de las fabricantes de medicamentos genéricos. Y en medio, el derecho de los pacientes al acceso a productos farmacológicos.
La autonomía estratégica genera un amplio consenso en el Parlamento Europeo
Para el europarlamentario, en este debate debe primar la accesibilidad, razón por la cual su grupo aboga por el mencionado recorte, más cerca de la cifra de seis años propuesta por la Comisión Europea frente a los ocho actuales, y lejos de los nueve defendidos por la ponente de la iniciativa legislativa, la popular Pernille Weiss. A modo de consenso, el texto votado sitúa a la reducción a siete años y medio.
La razón aducida por el cargo socialista es que, a día de hoy, no todos los fármacos se suministran en todos los países de la UE, y que reduciendo el número de años de explotación comercial, por un lado, mientras se otorgan pluses a las compañías que garantizan ese suministro en todo el territorio comunitario, tendrá un efecto virtuoso. Los diferentes incentivos previstos en la actualidad prevén extensiones del tiempo de explotación de hasta doce años.
Depende de los resultados de las elecciones para la próxima legislatura, que se imponga la posición de los que piden recortes en los tiempos base referidos y los que abogan por incrementar el baseline, incentivos aparte. La izquierda, en general, estaría en el primer grupo y la derecha y liberales en el segundo.
En cambio, el consenso relativo a la autonomía estratégica de la UE es amplio. Abarca prácticamente todos los grandes grupos del Parlamento Europeo, pero su concreción está aún por desarrollar.
En cualquier caso, recuerda Nicolás González, la tendencia en la legislatura anterior ha sido la de reforzar la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) y el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (Ecdc, por sus siglas en inglés) y el impulso de estrategias conjuntas contra el cáncer y enfermedades renales crónicas. Queda pendiente para la próxima legislatura hacer lo propio con las patologías cardiovasculares, concluye el socialista.