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Alomar (Creu Blanca): “Los grupos clínicos de menor tamaño deben ofrecer atención más personalizada”

La directora gerente del grupo Creu Blanca opina que el sector de la salud se ha desatomizado  y defiende que “la competencia es la base para dar un buen servicio”.

Albert Cadanet

11 abr 2019 - 04:56

Alomar (Creu Blanca): “Los grupos clínicos de menor tamaño deben ofrecer atención más personalizada”

 

Eulalia Alomar es la actual directora gerente de los centros médicos Creu Blanca, grupo al que lleva vinculada desde hace más de 25 años. La firma, fundada en 1950, cuenta actualmente con seis instalaciones (cuatro en Cataluña y dos en Aragón). Para la ejecutiva, la colaboración público-privada en sanidad es esencial y pide a los partidos políticos que compañías como la suya puedan participar en la atención sanitaria “de toda la población”.

 

Pregunta: ¿Es excesiva la concentración de centros hospitalarios privados en España?

Respuesta: En toda España ha entrado un grupo muy fuerte que está adquiriendo muchos hospitales y centros médicos, algo que no creo que sea bueno. Cuando tienes un único proveedor de sanidad privada, la calidad de este servicio disminuirá. La competencia es la base para dar un buen servicio. Hay demasiada concentración, aunque tampoco pienso que exista un monopolio absoluto.

 

P.: ¿Dicha situación sucede sólo en España?

R.: Hay una tendencia generalizada en la que los pequeños hospitales privados no pueden subsistir. Antes teníamos un modelo atomizado donde la mayoría de países contaban con pequeñas consultas. Ahora, los profesionales se juntan para dotarse de mayores equipos.

 

P.: ¿El mercado hospitalario privado en España sigue siendo atractivo?

R.: Todavía hay mucho margen de crecimiento. Teniendo en cuenta el modelo sanitario actual, la sanidad pública gratuita no puede abarcar todos los servicios. Esto genera grandes oportunidades a la hora de introducir una atención más personalizada, algo que desde un modelo a gran escala es más complicado ofrecer. Este es el camino que deben seguir los grupos clínicos de menor tamaño. Por eso hay centros como el nuestro que están creciendo y realizando nuevas inversiones.

 

 

P.: Durante estos últimos años, los costes de la sanidad han aumentado notablemente. ¿Cómo se puede hacer frente a esta tendencia?

R.: Al final estamos hablando de servicios que demanda la población. La gente que atendemos y las propias aseguradoras son las que cubren la mayor parte de estos costes. A nosotros, este modelo nos está funcionando.

 

P.: ¿Hasta qué punto las clínicas privadas dependen del sector asegurador?

R.: Las compañías aseguradoras necesitan a las clínicas privadas para poder ofrecer sus servicios y vender pólizas. Si nosotros no existiéramos, ellos no tendrían negocio. Ahora bien, algunas de ellas están apostando por la construcción de centros propios. Podríamos pensar que esta tendencia podría amenazar al sector hospitalario privado, pero los seguimos viendo como partners. No están suplantando nuestra oferta, sino que la complementan.

 

P.: A menudo se habla de la necesidad de establecer una colaboración público-privada en sanidad. ¿Por dónde pasan estos acuerdos?

R.: A la pública le interesa tener dispositivos que funcionen constantemente, ya que atienden a un mayor número de población. A la hora de hacer pruebas más complejas, se requieren herramientas mucho más caras y un mayor tiempo de atención al paciente. Ante esta situación, es mucho más barato para el sistema público llegar a un acuerdo con un hospital privado, que ofrecerá estos servicios a un precio más asequible.

 

 

P.: ¿Y qué debería aprender la sanidad privada de la pública?

R.: La pública reúne a los mejores profesionales y trabaja muy bien la investigación, un tema en el que la privada debería estar a la altura.

 

P.: ¿Qué debería aprender la sanidad pública de la privada?

R.: La gestión que se hace de los costes.

 

P.: Creu Blanca es un grupo familiar con más de 60 años de historia. ¿En qué se diferencia la gestión de un grupo familiar a la de una compañía privada compuesta por inversores?

R.: En un grupo familiar, la implicación de los accionistas en la gestión es más directa. La empresa se preocupa más por el servicio que por los costes, mientras que un grupo inversor centrará toda su atención en que salgan los números a final de año.

 

P.: En menos de dos semanas se celebran las elecciones generales en España. ¿Qué le pediría a los partidos?

R.: Les pediría que nos dejaran participar en la atención sanitaria de toda la población. No queremos que nos tengan en cuenta como un grupo que sólo busca el dinero. Junto con la pública, podemos llegar a acuerdos que permitan mejorar la salud de toda la sociedad.