Bayer reduce un 98% sus pérdidas hasta el tercer trimestre de 2021

Bayer reduce drásticamente sus números rojos en los nueve primeros meses del año. La farmacéutica alemana registró unas pérdidas de 161 millones de euros entre enero y septiembre de 2021, aunque mejoró el resultado negativo de 10.800 millones de euros registrado en el mismo periodo de 2020.

Desde la compañía justifican esta mejora gracias a que el negocio de fitosanitarios y otros productos agrícolas logró “un notable crecimiento” y la división de farmacia se benefició del fuerte aumento de las ventas del medicamento Eylea contra la degeneración macular húmeda asociada a la edad.

De acuerdo con las cuentas publicadas este martes, la facturación de Bayer aumentó un 5% entre enero y septiembre de 2021 en comparación con el mismo periodo de 2020, hasta 32.963 millones de euros. El resultado bruto de explotación (ebitda) se situó en 8.784 millones de euros, frente a los 9.069 millones de euros de un año atrás.

Bayer alcanzó un beneficio de 85 millones de euros en el tercer trimestre de 2021

En el tercer trimestre, la farmacéutica germana alcanzó un beneficio de 85 millones de euros, frente a las pérdidas de 2.744 millones de euros del acumulado entre enero y septiembre de 2020.

Las ventas, por su parte, aumentaron pasando de 8.506 millones de euros de enero a septiembre de 2020 a 9.781 millones de euros en el acumulado hasta el tercer trimestre del presente ejercicio.

El presidente de Bayer, Werner Baumann, ha revisado al alza sus pronósticos para este año y prevé una facturación de 43.000 millones de euros, lo que significa un crecimiento del 7%. “Nuestro desempeño en el tercer trimestre muestra que estamos en el camino correcto, tanto en términos de desarrollo operativo como de lanzamiento al mercado de nuevos productos”, añade Baumann, subrayando la fortaleza de Bayer en la entrega innovaciones. “Hemos alineado nuestra estrategia corporativa y nuestro potencial de innovación hacia la salud y la nutrición, que son áreas de importancia sistémica”.

En España, la compañía ha comunicado a los representantes de los trabajadores que iniciará un expediente de regulación de empleo (ERE). Este proceso puede afectar al centro de Sant Joan Despí y al de Madrid. El objetivo de este movimiento es finalizar el contrato de 85 trabajadores en el país. La medida responde a la necesidad de adaptarse a la transformación digital, a los cambios de preferencias de los profesionales ya la irrupción de nuevas formas de trabajo y organización más flexibles, según la empresa.