BioNTech provisiona 900 millones por el frenazo en las ventas de la vacuna contra el Covid

BioNTech sufre con la vacuna contra el Covid-19. La compañía ha anunciado hoy que ha llevado a cabo una provisión de 900 millones de euros como consecuencia del deterioro de su inventario porque la demanda de la vacuna realizada en alianza con Pfizer está siendo menor de la prevista inicialmente.

A través de un comunicado, BioNTech ha señalado que “Pfizer ha informado de que la mayoría de las cancelaciones se refieren a materias primas, principalmente lípidos relacionados con la formulación, adquiridos durante la pandemia, así como a dosis de la vacuna Covid-19 adaptadas a otras variantes”.

Actualmente la biotecnológica alemana se encuentra analizando el impacto de las cancelaciones de Pfizer, que aparecerá en los resultados del tercer trimestre de 2023, que se darán a conocer el próximo noviembre.

El anuncio de BioNTech llega después de que Pfizer haya reducido sus previsiones para la vacuna del Covid-19 (Comirnaty) y para su antiviral (Paxlovid) por la baja demanda. Moderna, Pfizer y BioNtech han despertado durante los últimos meses el recelo de los inversores por la difícil predicción de la demanda de dosis de las vacunas contra el Covid-19.

BioNTech cerró el ejercicio pasado con un beneficio de 9.434 millones de euros, lo que se tradujo en un descenso del 8,3% respecto a 2021, por una caída en las ventas de la vacuna contra el Covid-19 durante el periodo.

Pfizer también ha rebajado previsiones de facturación en más de cuatro mil millones de dólares por la nueva demanda de vacunas 

La facturación de BioNTech en 2022 fue de 17.311 millones de euros, lo que supuso un descenso del 8,8%. Por segmentos de negocio, los procedentes de la comercialización de medicamentos fueron de 17.195 millones de euros, mientras que la división de investigación y desarrollo (I+D) aportó 116 millones de euros.

En cuanto a Pfizer, la farmacéutica estadounidense cerró el segundo trimestre del año con un beneficio neto atribuible de 2.327 millones de dólares, un 77% menos que en el mismo periodo de 2022. La compañía está haciendo frente a la bajada de la demanda de productos para el Covid-19, tanto para la vacuna como para el antivírico Paxlovid.

La empresa comunicó que esperaba que las ventas de estos productos siguieran cayendo durante el último trimestre del año. Para solucionar la caída de las ventas de los productos Covid, han sido los fármacos de empresas recientemente adquiridas por Pfizer (como la medicación contra la migraña de Biohaven Pharmaceuticals o el tratamiento de anemia de Global Blood Therapeutics) los que han equilibrado la cuenta de resultados.

Esta circunstancia está afectando a todo el sector. En septiembre, Moderna comunicó que reduciría la producción de vacunas contra el coronavirus para adaptarse a una menor demanda y poder alcanzar el crecimiento del margen bruto previsto, un objetivo que pasaba por llevarlo del 75% al 80%. Como consecuencia de esta situación, la biotecnológica estadounidense anotó pérdidas de 1.301 millones de dólares en la primera mitad del año, frente a los beneficios de 5.854 millones de dólares advertidos en el mismo periodo de un año atrás.