Grifols y Almirall: cara y cruz de la inversión en I+D en el primer trimestre

Grifols y Almirall son la cara y la cruz de la inversión en investigación y desarrollo (I+D). Los dos tótems del farma español aumentaron sus beneficios en el primer trimestre del año, pero no el gasto en I+D. Mientras la compañía presidida por Víctor Grifols incrementó esta partida un 17%, la empresa de los hermanos Gallardo la redujo en más de un 20%.

Según las últimas cuentas trimestrales de los dos gigantes farmacéuticos del Ibex, Grifols realizó una inversión en I+D de 73,5 millones de euros en el primer trimestre, frente a 62,6 millones de euros invertidos entre enero y marzo de 2017.

Durante los primeros tres meses del año, Grifols obtuvo dos aprobaciones regulatorias de la Food and Drug Administration (FDA, por sus siglas en inglés), una nueva formulación para pacientes expuestos al virus de la hepatitis A y otra para pacientes expuestos al virus de la rabia. En el ámbito de estudios clínicos destaca la finalización de la fase IIb/III del ensayo clínico Alzheimer Management By Albumin Replacement para el tratamiento del alzhéimer.

Asimismo, Grifols aportará al Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa 1,5 millones de euros anuales durante cinco años. Estos recursos permitirán financiar líneas de investigación para avanzar en la búsqueda de tratamientos para el VIH.

Grifols realizó una inversión en I+D de 73,5 millones de euros en el primer trimestre

Grifols cerró el primer trimestre con un beneficio neto de 143,4 millones de euros, un 7% más respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. Sin embargo, los ingresos del grupo farmacéutico descendieron un 3,6%, hasta 1.023 millones de euros.

La cruz es para Almirall. La compañía farmacéutica ha visto como la inversión en I+D se redujo un 23% en el primer trimestre de 2018, hasta 18,6 millones de euros. Parte de esta caída se produce por el retraso de la aprobación del fármaco tildrakizumab, indicado contra la psoriasis, en los mercados europeos. La luz verde por parte de la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) se aplaza a finales de 2018 o principios del año que viene.

No obstante, la compañía continúa con el avance de su fármaco de dermatología Skilarence, destacando que este segmento de actividad muestra “buen rendimiento”, después que Almirall empezara a comercializarlo en Europa el pasado septiembre.

Almirall registró un beneficio neto de 30,9 millones de euros en el primer trimestre de 2018, un 57,1% superior a la del mismo periodo del año anterior. El grupo farmacéutico obtuvo un resultado bruto de explotación (ebitda) de 58 millones de euros entre enero y marzo, un 5,4% más.