Álvarez (UGT): “El sector sanitario privado puede participar en la prestación de servicios públicos bajo vigilancia”

Gracia Álvarez es secretaria de salud, servicios sociosanitarios y dependencia de la organización sindical UGT. La sindicalista, enfermera de profesión, forma parte de la entidad de trabajadores desde hace más de treinta años y considera que “es imprescindible que el Ministerio de Sanidad exista” para coordinar todas las comunidades autónomas en materia sanitaria.

Pregunta: En el último año hemos cambiado tres veces de ministra de Sanidad en España, ¿con tanto cambio se puede avanzar en política sanitaria?

Respuesta: Los cambios ralentizan, aunque lo que más puede cambiar es cuando variamos de color político. De Dolors Montserrat a Carmen Montón ha habido un cambio, pero con la nueva ministra de Sanidad todavía no ha habido tiempo. El próximo lunes nos reuniremos con ella para repasar la situación de la sanidad y las demandas al Gobierno.

P.: Si las Comunidades Autónomas tienen las competencias en sanidad, ¿qué papel tiene el Ministerio?

R.: Es imprescindible que el Ministerio de Sanidad exista, ya que tiene que haber una coordinación de todas las comunidades autónomas. Defendemos una coordinación centralizada, donde las diferencias entre las comunidades no sean como estar entre diferentes países. Somos españoles en todas las comunidades, por lo que los servicios que se prestan tendrían que ser más o menos los mismos. No es que se les quite competencias a las comunidades, pero sí que haya unos márgenes entre unos y otros que sean aceptables.

“Creo que todavía tenemos un muy buen sistema de salud, que ofrece mucha cobertura y prueba de ello es la longevidad”

P.: ¿Es óptimo el modelo de gestión a través de 17 comunidades autónomas?

R.: Óptimo no hay nada, todo es mejorable. Nuestra función es mejorarlo de acuerdo a la realidad que va cambiando. Creo que todavía tenemos un muy buen sistema de salud, que ofrece mucha cobertura y prueba de ello es la longevidad. ¿Tiene problemas? Sí. ¿Es mejorable? Sí. Llevamos con la ley General de Sanidad desde 1986, es necesario repasar algunos puntos para adaptarla a la realidad. Hay que tener en cuenta, además, que el envejecimiento, la digitalización y la inteligencia artificial producirán cambios importantes y hay que estar preparados.

P.: ¿Es cierto que el sistema sanitario público español es de los mejores del mundo?

R.: En la última valoración de los sistemas sanitarios hemos descendido. Desde 2007, con la crisis y los recortes, uno de los ámbitos que más se ha resentido es la atención privada y esa es la puerta de entrada al sistema sanitario, que tiene entre sus funciones la prevención de enfermedades.

P.: ¿Se han deteriorado las condiciones de trabajo de los trabajadores sanitarios?

R.: El deterioro de las condiciones de trabajo es muy serio, porque repercute a largo plazo. Las bajas por estrés o los problemas con músculos tienen mucho que ver con la presión asistencial. Si los salarios son importante, las condiciones laborales también lo son. Los trabajadores de sanidad están expuestos a productos tóxicos, contagios y a la nocturnidad, que no son favorables para la salud. Cuando trabajas bajo presión, si te pasas pones en riesgo tu propia seguridad y la de los usuarios.

“Es necesarita también una coordinación estatal e invertir en la prevención y en vivir de forma más saludable”

P.: ¿Qué cambios y reformas son necesarios para que el sistema sanitario público mantenga su calidad y sea sostenible a largo plazo?

R.: Si tuviera esa receta igual era ministra de Sanidad. Más inversión, pero también hay un problema de financiación con las autonomías. Se necesita también una coordinación estatal e invertir en la prevención y en vivir de forma más saludable. Además, hay que mantener la atención centrada en el paciente y no olvidar que el sistema de salud es para cuidar de las personas. Para los trabajadores sanitarios el desafío es adaptarse a las tecnologías nuevas que vienen.

P.: ¿El copago farmacéutico es una buena idea?

R.: No, porque recibir una asistencia es un derecho, y dentro de esta están las medicinas. Es un derecho universal, como la educación. Es necesario recibir la asistencia y medios adecuados para curarnos.   

P.: ¿El sector privado debe participar en la prestación de servicios públicos?

R.: Por poder sí, pero con límites y vigilándolo. El sector sanitario privado puede participar en la prestación de servicios públicos bajo vigilancia. Además, si hace esta contratación de servicios tiene que ser bajo las condiciones que pone el Estado. Hay que mirar con lupa, porque es dinero público, dinero de todos los españoles.

“Hay que mantener la atención centrada en el paciente y no olvidar que el sistema de salud es para cuidar de las personas” 

P.: ¿Le preocupa el aumento de los seguros privados en España?

R.: Por lo menos es algo que la Administración debe plantearse y estar atento. Puede ser foco de cierto descontento e insuficiente calidad en sistema de salud. Es algo a tener en cuenta pero no como pieza angular.

P.: ¿Es viable implantar una jornada de 35 horas en sanidad?

R.: Sí, porque estuvo implantada durante un tiempo antes de los recortes. No creo que haya sido la causa de la crisis, sino que esta nos ha supuesto el aumento de la jornada laboral. La petición de 35 horas también va en el sentido de aumentar el empleo.