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Qida se muda: traslada sus oficinas al centro de Sabadell y prepara el lanzamiento de su ‘app’ de salud

La compañía española, especializada en la prestación de servicios sociosanitarios, cuenta con un nuevo espacio de 400 metros cuadrados en la localidad barcelonesa. La empresa ha levantado recientemente más de un millón de euros en una ronda de inversión.

A. Escobar

22 jul 2019 - 05:00

Qida se muda: traslada sus oficinas al centro de Sabadell y prepara el lanzamiento de su ‘app’ de salud

 

Qida se muda. La compañía catalana de servicios sociosanitarios ha cambiado de oficinas y ha trasladado a todo su equipo al centro de la localidad barcelonesa de Sabadell, en un espacio que suma aproximadamente 400 metros cuadrados. En paralelo, la start up prepara el lanzamiento de su app, confiando en que esté disponible después de verano, según ha informado Oriol Fuertes, consejero delegado y fundador de Qida, a PlantaDoce.

 

Hasta ahora, la empresa ocupaba un espacio de 125 metros cuadrados en el número 9 de la calle Sentmenat de Sabadell. El equipo de Qida se muda al número 33 de la calle doctor Puig de este término municipal, fruto del “crecimiento que viene notando la compañía”, explica Fuertes.

 

La empresa, que ofrece servicios de atención domiciliaria en Cataluña, contrata a cuidadores profesionales y ya realiza más de 30.000 horas al mes en cuidados y prestaciones a mayores y atiende a más de 300 familias. El objetivo de Qida es expandir su actividad a más comunidades autónomas y dar el salto al extranjero en 2020.

 


 

 

 

 

Asimismo, la empresa de servicios sociosanitarios ha alquilado un espacio de coworking en el centro de Barcelona, concretamente en el número 366 de la calle Aragón. El emplazamiento en cuestión está reservado para el equipo tecnológico y de producto, los encargados del diseño de la nueva web de Qida y del desarrollo de la app dirigida a clientes y cuidadores, que verá la luz presumiblemente en los próximos dos meses.

 

Los cambios se producen siete meses después de que la empresa cerrara una ronda de 1,2 millones de euros. La operación estuvo liderada por la iniciativa de emprendimiento del Banco Sabadell, BStartup, aunque también contó con el respaldo de la Fundación Ship2B, que invierte en compañías de impacto social.

 

La compañía dispone de un equipo conformado por 26 personas, que atienden a las familias y a los cuidadores los siete días de la semana. Oriol Fuertes, que trabajó para McKinsey y para la secretaría general de Sanidad de la Generalitat cuando Boi Ruiz ejerció como consejero de este departamento, es el consejero delegado de Qida. Junto a Fuertes también están como cofundadores Guillem Garcia, director financiero; Anna Montañés, jefa de producto, y Antoine Ballu, responsable de estrategia y operaciones.

 

 

 

 

 

 

La empresa barcelonesa trabaja con otras compañías como Tunstall Televida, Synlab o Fiatc Residencias. Para esta última, por ejemplo, Qida ofrece sus servicios de cuidado y acompañamiento a sus residentes en los centros.

 

El equipo de Qida está formado en un 50% de trabajadoras sociales que acompañan a las familias y a los cuidadores. Entre todos, tienen experiencia asesorando a más de siete gobiernos sobre su estrategia sanitaria, creando productos digitales para enfermos crónicos, trabajando para grandes farmacéuticas y cuidando a gente con dependencia.