Misión, no depender de China: ¿cómo debe evitar España otra crisis de suministros de sanitarios?
El Ministerio de Sanidad ha anunciado la creación de una reserva estratégica nacional de equipos de protección individual, mientras que los expertos creen que una única provisión no tiene sentido en un país descentralizado y apuestan por fortalecer la industria nacional.
8 jun 2020 - 04:58
Los tambores de rebrote en otoño resuenan y el Gobierno y los agentes del sector empiezan a reflexionar sobre cómo evitar los problemas y errores del pasado, entre ellos la crisis de suministro. Para ello, Salvador Illa busca evitar a toda costa otra crisis sanitaria y crisis de suministros parecidas y prepara la creación de una reserva de material sanitario.
La opción de un eventual rebrote del coronavirus preocupa al Gobierno y el Ministerio de Sanidad quiere estar prevenido. Salvador Illa, ministro de Sanidad, anunció el pasado jueves la creación de una reserva estratégica nacional de equipos de protección individual. El Ejecutivo argumenta la decisión con el objetivo de “garantizar una rápida respuesta ante nuevas ondas epidémicas o bien emergencias de salud pública”.
Manel Peiró, director del Institute for Healthcare Management de Esade, opina que “las posibles reservas las deberían tener las autonomías, que son las que gestionan la operativa del día a día de la sanidad”. Además, Peiró se muestra crítico con la gestión de la pandemia de Sanidad, ya que “uno de los grandes errores que se ha cometido ha sido centralizar las compras cuando hace veinte años que el ministerio no adquiere nada”.
El Ministerio de Sanidad ha informado de la creación de una reserva estratégica nacional de material sanitario para dar respuesta a las emergencias de salud pública
En la misma línea, Jaime del Barrio, responsable del área de healthcare de EY, destaca que España debería tener una reserva con el mínimo indispensable de equipos de protección individual, pero “no necesariamente una única y nacional, ya que cada comunidad debería ser quién lo gestionase”. También refleja la importancia de tener perfectamente identificados los canales de producción y distribución del país para no depender de otros.
Boi Ruiz, exconseller de Sanidad de la Generalitat de Catalunya, indica a PlantaDoce que “una reserva nacional no parece lo más adecuado y ágil”. Por ello, cree que el stock de equipos de protección individual debería estar en los centros sanitarios o en los lugares más próximos a ellos. Ruiz añade que el abastecimiento previsto tendría que ser suficiente para cubrir el plan de choque que requeriría la respuesta inicial contra una pandemia.
En contraposición, fuentes de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin) creen que España debería disponer de una estrategia a escala nacional para acometer cualquier epidemia y contemplar la creación una reserva nacional de material sanitario. “La estrategia incluye tanto la tenencia de equipos de protección individual como las capacidades para disponer de producción nacional en un corto espacio de tiempo”, según Fenin.
Fenin asegura que la estrategia debería incluir tanto el suministro de material sanitario, así como fortalecer la producción nacional
Salvador Illa informó el jueves en su comparecencia en la Comisión de Sanidad que la reserva estratégica “contará con las cantidades necesarias para poder cubrir un período mínimo de entre seis semanas y dos meses”. El abastecimiento engloba productos desde mascarillas quirúrgicas, mascarillas FPP2 y FPP3 y otros equipos de protección, hasta pruebas diagnósticas y medicamentos.
Sobre el presupuesto destinado a las reservas estratégicas nacionales o autonómicas, Manel Peiró destaca que esta pandemia “no nos sirve como referencia porque lo que se ha gastado ahora han sido unos sobreprecios increíbles”. Por su parte, Ruiz señala que el presupuesto debería calcularse a partir del precio inicial de los medios necesarios, acorde con la predicción epidemiológica, y su almacenamiento y mantenimiento. Fenin también refleja que de esta crisis es necesario extraer datos para llevar a cabo el presupuesto y las previsiones de material destinados a la reserva.
Todos los expertos consultados apuestan por fortalecer la industria nacional de fabricación de material sanitario. Sin embargo, España casi no tiene fábricas de mascarillas, por ejemplo, debido a la poca rentabilidad y valor añadido de sus productos. Por esa razón el Gobierno central y las autonomías tuvieron que recurrir al mercado internacional para poder comprar equipos de protección individual para sus sanitarios.
Esta crisis de suministros no sirve como referencia para conocer el presupuesto destinado a la reserva de equipos de protección individual
Fenin alega que la producción nacional debería ser “obligadamente fortalecida y apoyada a través de incentivos y ventajas fiscales”. Además, creen que se debería formar un tejido de mecanismos para asegurar los proyectos de empresarios españoles y ejecutivos de empresas multinacionales con plantas de fabricación. Es necesario que la administración central apoye a las empresas del sector de tecnología sanitaria y diseñe un plan estratégico, según la federación especializada en el desarrollo tecnológico.
Jaime del Barrio, responsable de EY, destaca que “uno de los déficits que se han puesto en evidencia ha sido la fabricación y distribución de material sanitario”. Manel Peiró también coincide y es partidario de la reflexión de la necesidad de estas industrias a escala nacional y europeo. Ambos expertos acuerdan que “a pesar de que una pandemia como esta tiene un efecto global, la respuesta ha sido local”.
Por último, Boi Ruiz se sorprende por ver que no se haya contado con la industria española en la fabricación de equipos de protección individual disponiendo de un instrumento como el estado de alarma. No obstante, confía en que “para la seguridad de todos” se fortalezca la industria para “no estar sometidos al mercado especulativo exterior”.
La producción nacional debería ser obligadamente fortalecida y apoyada a través de incentivos y ventajas fiscales, según Fenin
También se habla mucho del papel de la Unión Europea en esta pandemia y de posibles rebrotes. Manel Peiró considera que “debería plantearse hasta qué punto la producción de material sanitario tiene que estar en Europa”. Este tipo de industrias, poco rentables, requieren de un apoyo estatal o supraestatal y, según Peiró, “si abarca el mercado europeo, cabe la opción que pueda subsistir”.
Del Barrio cree que cada estado tendría que gestionar la producción y distribución de los equipos de protección individual y la UE debería tenerlo todo identificado en un panel central. Boi Ruiz añade que además podría ayudar con vías de financiación para disponer y mantener los stocks.
Los partidos políticos también reflexionan sobre la creación de reservas estratégicas de material sanitario. De hecho, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha informado que crearán un proyecto de ley para crear un abastecimiento de equipos de protección individual y estará listo en la primera quincena de junio. Page ha reflejado que esta medida pretende proteger “el conjunto de la región y las instalaciones públicas”.
El senador del PP, Juan Pablo Martín, impulsó una moción que planteaba al Gobierno a modificar la ley General de Salud Pública para crear una reserva estratégica nacional. Además, Martín anunció que esta propuesta debería extenderse a “todas las empresas, instituciones y establecimientos abiertos al público”. Por último, fuentes de Podemos consultadas por PlantaDoce destacan que “lo lógico es tener una reserva nacional centralizada y un stock en cada comunidad”. El grupo liderado por Pablo Iglesias también cree necesario y urgente fortalecer la industria nacional.