Telemedicina: acelerar al calor del distanciamiento
El coronavirus ha impulsado la implementación de la telemedicina hasta situarla como un recurso más en el sistema sanitario.
30 dic 2020 - 04:58
Como cada año, PlantaDoce.com realiza en las últimas semanas de diciembre un repaso a los últimos doce meses en el negocio de la salud, marcados por el impacto de la pandemia del Covid-19. Análisis macroeconómico de España y el mundo, recorrido por los fenómenos sociales que ha provocado el coronavirus y un recorrido por el impacto en las principales empresas del sector forman el Especial 2020: el negocio de la salud en el año del Covid-19.
Especial 2020: El negocio de la
salud en el año del Covid-19
Telemedicina: el recurso en el que hasta ahora no se había confiado y que hubiera permitido a España afrontar mejor la gestión del Covid-19. Los expertos coinciden en que si este recurso tecnológico hubiera estado mejor implementado en los sistemas sanitarios, se hubiera podido evitar el caos que se produjo. La telemedicina, desde hace años presente en los sistemas sanitarios aunque poco consolidada, hubiera permitido encarar con mayores garantías los problemas provocados por la pandemia.
Los expertos destacan que el impacto de la pandemia ha acelerado la implementación de los recursos tecnológicos en el sistema sanitario, tanto público como privado. La telemedicina se ha instaurado como una herramienta más en la sanidad y ha entrado en contacto con un mayor número de pacientes y usuarios.
El estallido de la pandemia, el riesgo que implicaba acudir a lugares donde permanecían ingresados pacientes con coronavirus y la disposición total de los recursos sanitarios para hacer frente al virus crearon el contexto idóneo para apostar por la telemedicina. El presidente de la Asociación Salud Digital (ASD), Jaime del Barrio, aseguraba en marzo que las claves del retraso de su implantación son que “los profesionales se han resistido al avance, ha faltado liderazgo del Ministerio de Sanidad y tampoco ha habido formación”.
La telemedicina afloró como un recurso más para hacer frente a la pandemia y permitió acortar los tiempos de respuesta y aligerar la carga de trabajo de los centros sanitarios
Numerosos pacientes cancelaron sus citas médicas durante el inicio de la pandemia, pero había enfermos que no podían esperar. Algunos de ellos son los pacientes que acuden a los especialistas en salud mental. El consejero de ITA Salud Mental, Jaume Raventós, señalaba al inicio de la pandemia que “los psicólogos y los psiquiatras pueden hacer un uso cómodo de la telemedicina para seguir con la revisión de sus usuarios”.
Por su parte, Frederich Llordachs, cofundador y socio de Doctoralia, del grupo Docplanner, fue contundente y destacó en marzo que “si el sistema sanitario aprende algo de esta crisis, es que debe reestructurarse a partir de la visita no presencial”. En su opinión, el coronavirus fue “la excusa perfecta para usar la telemedicina”.
Esta tecnología afloró como un recurso más para hacer frente a la pandemia. Además, permitió acortar los tiempos de respuesta y aligerar la carga de trabajo en las urgencias y consultas de los centros sanitarios que apostaron por ella, por momentos colapsados. Algunas de las compañías del sector que ganaron aún más relevancia durante los primeros meses de la pandemia fueron Mediquo, Top Doctors o Doctoralia.
Mediquo es una compañía que ofrece un chat médico que conecta a médicos con pacientes y durante la crisis del Covid-19 desarrolló un servicio gratuito con asesores personales y médicos expertos en coronavirus. Por su parte, Doctoralia integró en su plataforma una nueva herramienta de videollamadas con la finalidad de facilitar la interacción entre especialistas y pacientes. Top Doctors puso sus servicios a disposición de profesionales médicos de forma gratuita para que atendieran a los enfermos.
El mercado de las aplicaciones de salud alcanzará un valor global de 17.310 millones de euros en 2027, desde los 3.510 millones de 2020
Sin embargo, la gran alianza del sector de la telemedicina ha sido la suscrita entre Teladoc y Movistar. Ambos gigantes se han unido para lanzar Movistar Salud, un servicio de telemedicina dirigido a particulares que permitirá a los usuarios estar siempre conectados con un médico de atención primaria. No obstante, esta colaboración y la oferta económica del servicio ha chocado frontalmente con la principal patronal de la sanidad privada, la Alianza de la Sanidad Privada Española (Aspe). El organismo considera competencia desleal los servicios de telemedicina ofertados por operadores tecnológicos no especializados y sin ninguna relación previa con el sector sanitario. La patronal alerta de la falta de transparencia de este servicio y destaca que degrada la profesión, ya que dispone de tarifas mensuales por debajo de la media.
Ajena a esta controversia, Teladoc continúa con su acelerón en el año del Covid-19. El grupo prevé alcanzar mil millones de dólares en ventas globales en 2020. Debido a la crisis del Covid-19, el mercado de las aplicaciones de salud alcanzará un valor global de 3.510 millones de euros en 2020, según la consultora Research and Markets. En 2027, este sector elevará su valor global hasta más de 17.300 millones de euros. De este importe, Alemania será el país que lidere el crecimiento en Europa. El estudio señala que el mercado de las aplicaciones de salud en el continente alcanzará un valor de 1.750 millones de euros en 2027.
Alemania publicó a finales de 2019 una nueva normativa en materia de salud digital. El país puso en marcha una comprobación rápida de los recursos de telemedicina que permite a los médicos recetar las aplicaciones de salud digital, como si fueran un medicamento cualquiera, durante un año sin que las empresas tengan que demostrar resultados de eficiencia y efectividad. Durante este tiempo de comprobación rápida, las compañías deben demostrar resultados económicos y sanitarios. La directora general de EIT Health Spain, Cristina Bescós, sostiene que con esta medida “Alemania ha roto la barrera de generar los resultados de evidencia del producto o servicio, que sólo se pueden conseguir si su uso es mayoritario”. Además, Bescós destaca que España debería aprender del apoyo de Alemania en salud digital.