ADN

Luis Ruiz (Archivel): “Hay miedo de que en la inversión en salud estemos vistiendo un santo para desvestir otros”

El asesor de Archivel Farma reconoce que ha habido una generalización de ayudas para proyectos Covid-19 durante estos meses, pero que ahora la “barrera tecnológica” para acceder a este tipo de financiación será más exigente.

A. Escobar

17 sep 2020 - 04:58

Luis Ruiz (Archivel): “Hay miedo de que en la inversión en salud estemos vistiendo un santo para desvestir otros”

 

Luis Ruiz es asesor de Archivel Farma y ha creado una spin off para hallar la vacuna contra el coronavirus. Doctor en Genética Molecular, comenzó su trayectoria empresarial en la farmacéutica Almirall, en gestión de proyectos y desarrollo de negocio. El también consejero delegado de Leukos Bioetch no cree que vayamos a disponer en poco tiempo de una “solución terapéutica de alcance masivo”.

 

Pregunta: ¿Es un buen momento para los emprendedores en salud?

Respuesta: Desde el punto de vista de la inversión, la biomedicina ha sido un sector refugio en los últimos meses y la actividad ha sido frenética. Hay gente que nunca se había planteado invertir en sanidad y ahora ha apostado por ella y se ha sensibilizado más. La lección aprendida de esta crisis es que la prevención y tener herramientas para lo desconocido, a la larga genera el retorno de la inversión. Me pregunto cuál hubiera sido ese retorno si hubiésemos tenido un producto guardado en el cajón durante años y lo hubiésemos lanzado en marzo con el estallido de la pandemia. No se hizo no porque no hubiera ciencia, sino porque no había el incentivo del corto plazo.

 

P.: ¿A quién se refiere?

R.: Business angels o family offices que nunca antes se hubieran planteado invertir en salud. Hay una gama de inversores que tienen un componente emocional muy grande y esta crisis les ha hecho cambiar sus pensamientos.

 

P.: ¿Es más fácil obtener financiación privada si tu empresa ahora mismo está desarrollando avances contra el Covid-19?

R.: Ya no. Hubo un boom de proyectos, pero ha habido una cierta saturación. Ahora mismo partir de cero no sé si es tan atractivo para los inversores. Hay un efecto contagio de discurso Covid-19. Los productos antivirales de amplio espectro sí se pueden mover a caballo de la experiencia del coronavirus e impactar en el sector.

 

 

 

 

P.: ¿La pandemia sirve como catalizador de la colaboración público-privada?

R.: Los instrumentos utilizados ya existían y ha habido una generalización de ayudas para proyectos Covid-19 durante estos meses. Eso tiene una segunda lectura, y es que los recursos son limitados y no todos los proyectos tienen sentido. Quizás se ha hecho una política de disparar a todo lo que se mueve porque también es normal al principio. Hay miedo de que estemos vistiendo un santo para desvestir otros y hay otras áreas de investigación que pueden verse afectadas en el corto plazo.

 

P.: ¿Los recursos pueden desinflar ese boom de proyectos en salud?

R.: Es que no es sostenible para siempre. Lo que esté por venir tiene que ser muy diferente a lo visto en la primera oleada. Cada vez más la barrera tecnológica para acceder a este tipo de financiación será más exigente.

 

P.: ¿La misión primordial ahora es hallar la vacuna, ¿no?

R.: Hallar la vacuna y diagnósticos rápidos. La idea de una solución terapéutica de alcance masivo es más complicada. La vacuna parece más accesible porque hay muchas empresas compitiendo a la vez y están todas en fases clínicas. También hay una lucha muy interesante por ver quién lanza antes el predictor más relevante y como alternativa a las pruebas PCR.

 

 

 

 

P.: ¿El tiempo de obtención de los resultados va reñido con la fiabilidad de las pruebas?

R.: Va reñido con la fiabilidad si no llevas tiempo trabajando. Pero hay empresas muy serias dedicándose a ello desde hace tiempo.

 

P.: ¿El retraso en el ensayo clínico de la vacuna de AstraZeneca y Oxford es una lección para los políticos que aventuran que a finales de año tendremos la cura? ¿Vamos o queremos ir más rápido que la propia ciencia?

R.: Es lógico, pero es arriesgado. Hacer esas afirmaciones tiene un riesgo tremendo. También la gente que está con la alcachofa delante de los medios tiene que gestionar las expectativas de la población con mayor o menor fortuna. En biología es muy arriesgado decir que una cosa va a salir bien, las cosas no son blancas o negras, sino que existen los matices grises. Los científicos trabajamos permanentemente con condicionales.

 

P.: ¿Dispondremos de tantas vacunas surgidas de diferentes proyectos?

R.: Lo más probable es que no exista una única vacuna que solucione todo. Habrá para mayores, para la población pediátrica, para personas con ciertas afecciones. Hay cuatro o cinco clases diferentes de aproximaciones vacunales. Lo que hay que identificar es qué vacunas va a pagar la Organización Mundial de la Salud (OMS), las que cubrirá la Seguridad Social o las que estén en el circuito de la sanidad privada.