¿Privatización? El gasto público en conciertos, por debajo del 9% desde 2019

¿Creciente privatización de la sanidad? ¿Más colaboración público-privada para hacer frente a los retos del sistema nacional de salud? Números en la mano, todo lo contrario. Según datos del Ministerio de Sanidad, el porcentaje del gasto sanitario de las comunidades autónomas vehiculado a través de agentes privados de servicios sanitarios se ha situado por debajo del 9% en los tres últimos ejercicios con datos disponibles.

En 2021, el gasto en conciertos se situó en el 8,76% del total, frente al 8,44% del año anterior y el 8,85% de 2019. En el último año antes del estallido de la pandemia se alcanzó el ratio dedicado a conciertos con la sanidad privada más bajo de toda la serie estadística, que comienza en 2002, y se bajó del umbral del 9% por primera vez en diez años. Hasta 2005, el gasto en conciertos superaba el 10% del gasto sanitario público total.

El descenso del ratio de gasto destinado a conciertos es una tendencia que se da en la mayoría de las comunidades autónomas españolas, incluso en Cataluña, donde los conciertos con la sanidad privada tienen una mayor implantación histórica.

En la comunidad catalana, el gasto destinado a conciertos en 2021 se situó en el 23,3%, el nivel más bajo de la serie estadística. En 2002, el gasto concertado en Cataluña alcanzaba el 36,05% del total, desde 2007 este ratio se ha mantenido por debajo del 30% y desde 2019, por debajo del 25%: 23,9% en 2019, 23,6% en 2020 y 23,3% en 2021.

Cataluña ha pasado del 36% del gasto en conciertos en 2002 al 23,3% en 2021

Por el contrario, la Comunidad de Madrid es la única en la que el gasto en conciertos ha aumentado en los últimos años de forma sustancial, aunque con varios altibajos: pasó del 10,3% en 2019 al 8,5% en 2020 (el valor más bajo en casi una década) y al 11,24% en 2021, el ratio más alto de la serie estadística.

Ninguna otra comunidad autónoma alcanza un ratio de un euro de cada diez destinado a conciertos con la sanidad privada. El ratio es incluso inferior al 5% en ocho autonomías: Castilla-La Mancha (4,96%), Galicia (4,55%), Extremadura (4,16%), Comunidad Valenciana (3,95%), Andalucía (3,86%), Aragón (3,7%), Cantabria (3%) y Castilla y León (2,84%).

Por su parte, donde más ha retrocedido el peso de los conciertos en el gasto público son las comunidades de La Rioja y Canarias, con descensos de en torno a dos puntos porcentuales en los últimos cuatro años de la serie estadística. En La Rioja, el gasto en conciertos ha pasado del 7,76% en 2018 al 5,6% en 2021, y en Canarias el peso ha caído del 9,05% al 7,12%.

Tras Cataluña y Madrid, Baleares y Canarias son las dos autonomías donde el gasto en conciertos alcanza un ratio más alto, del 8,58% y el 7,12%, respectivamente, seguidas de Navarra (6,56%) y País Vasco (6,06%).

Sólo la Comunidad de Madrid ha elevado de forma sustancial en los últimos años el gasto público vehiculado a través de conciertos con la sanidad privada

Los datos públicos sobre el presupuesto derivado en conciertos con la sanidad privada contrastan con las estimaciones que realizan entidades como la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública, que apuntan a un aumento en la “deriva privatizadora” de la sanidad pública en España.

Los análisis de esta entidad tienen en cuenta y consideran privatización, por ejemplo, aspectos como el porcentaje de población cubierta por mutualidades de funcionarios, el gasto sanitario per cápita en seguros privados, el porcentaje de camas hospitalarias privadas sobre el total o el porcentaje del equipamiento de alta tecnología en hospitales privados sobre el total.